Ambas entidades estadounidenses coincidieron en que las reservas seguirán cayendo y dudan sobre las fechas de desembolso de USD 5.400 millones del FMI
En un informe distribuido a sus clientes, el banco de inversión JP Morgan recomendó este miércoles vender acciones argentinas, frente a un panorama negativo para el país en el corto plazo. La calificadora financiera Moody’s, en tanto, advirtió que podría haber más salida de depósitos y analiza un escenario de posibles nuevas medidas que endurezcan el control de cambios.
«Nuestra calificación de neutral para la Argentina fue una consecuencia de la incertidumbre política en el período postelectoral. Las primarias (PASO) adelantaron la resolución a esa incertidumbre. Si bien el mercado está muy deprimido, preferimos no tener exposición (a las acciones argentinas) hasta que mejore la visibilidad», explicó JP Morgan en su informe.
En el informe de la firma estadounidense, advierten que decidieron «neutralizar» su exposición a la Argentina mientras que las encuestas previas a las elecciones presidenciales mostraban que la diferencia entre los dos candidatos —Mauricio Macri y Alberto Fernández— era muy ajustada.
Pero que luego de la «sorpresa significativa» que significaron los resultados de las PASO, con una amplia diferencia para el candidato de la oposición, asumieron que Fernández será el próximo presidente del país, lo que plantea «preguntas» sobre las políticas macro a futuro.
«La importante turbulencia financiera que desencadenaron las primarias implicó que las autoridades argentinas hayan tomado medidas como el reperfilamiento de la deuda pública, las restricciones a los dividendos y los controles de capital. Nuestra percepción es que el flujo de noticias negativas podría continuar, ya que todavía hay presión sobre las reservas de la Argentina debido a los retiros de depósitos en dólares», detallaron.
También mencionaron las posibilidades de que la Argentina pueda perder la clasificación de «mercado emergente» (EM) por parte de MSCI. «En este contexto, hemos decidido bajar la calificación de la Argentina. El principal riesgo sería que el próximo gobierno termine implementando políticas que no son tan negativas como las expectativas actuales. Sin embargo, creemos que teniendo en cuenta el escenario actual, tomaría mucho tiempo restaurar la confianza para permitir que los flujos vuelvan a las acciones argentinas», indicaron.
Como una de las conclusiones del informe, JP Morgan rebajó la calificación de la Argentina en su cartera y decidió eliminar las acciones del país. La excepción fue para Mercado Libre, a la que consideran que representa un «punto de entrada» atractivo.
Según el informe, podría haber más noticias negativas en el corto plazo para la Argentina. Los analistas de JP Morgan mencionan cinco puntos:
– Las reservas siguen disminuyendo a medida que continúan los retiros de depósitos en dólares.
– La incertidumbre con respecto al desembolso de USD 5.400 millones del FMI que se esperaba para mediados de septiembre.
– La posible reclasificación de Argentina por parte de MSCI.
– El hecho de que sea improbable que Alberto Fernández modere su discurso antes de las elecciones del 27 de octubre.
– Y las nuevas revisiones a la baja de las estimaciones macro.
Moody’s también
Moody’s, en tanto, publicó un informe en el que advierte mayores presiones para las reservas internacionales del Banco Central, luego de la caída de 30% de los depósitos en dólares del sector privado, que en una porción componen los activos de la entidad.
Por ello, la calificadora anticipa una continuidad en la pérdida de reservas, que se redujeron casi USD 16.000 millones en el mes posterior a las elecciones primarias, y prevé «controles de capitales adicionales» a los anunciados a fines de agosto, para ponerle contención al drenaje de divisas.
«En la mayoría de los países, las autoridades dependen de las reservas internacionales para intervenir en el mercado de divisas y limitar la volatilidad de los tipos de cambio y cubrir los pagos de la deuda externa», precisó la calificadora de riesgo.
«En Argentina, las reservas también se utilizan para cubrir los depósitos de los bancos de divisas, que generalmente disminuyen en tiempos de inestabilidad financiera. En vista de ello, siguen existiendo perspectivas de pérdidas continuas de reservas, lo que aumenta la probabilidad de que las autoridades impongan controles adicionales en un futuro próximo», expresó el informe.
Por otra parte, Moody’s hizo foco en la dilación del Fondo Monetario Internacional para ponerle fecha al desembolso de USD 5.400 millones previsto para este mes. «Una cancelación podría desencadenar una severa reacción de mercado, generar una significativa inestabilidad macro-financiera y comprometer aún más la débil posición crediticia de Argentina», advirtió.
«Creemos que es probable que el desembolso se retrase hasta que el FMI obtenga más claridad sobre la futura dirección de la política; en particular, la política fiscal y los planes de reestructuración de la deuda de la próxima administración, incluidos los pagos adeudados al FMI», expresó Moody’s.