Ayer el BCRA resignó otros US$ 200 millones, con lo que la pérdida de 2013 alcanza los 10.169 millones; es la mayor baja desde la crisis de 2001/02
La caída de las reservas internacionales no se detiene. Anoche el Banco Central (BCRA) reportó un nuevo retroceso de 200 millones de dólares en esa tenencia, según datos preliminares, por "una participación vendedora" en la plaza de cambios oficial local y cancelaciones de deudas varias, según explicó en su comunicado diario.
Así, la pérdida ya supera los US$ 10.000 millones en lo que va de 2013. Llega a los US$ 10.169 millones (23,5%) y orilla los 15.000 millones desde que el Gobierno, tras las elecciones de 2011, armó una estructura legal para contener o administrar buena parte de la demanda privada de divisas y tratar de lidiar con un escenario de restricción externa en alguna medida autoinfligido.
Se trata de la peor performance en este activo de valor estratégico para la economía desde 2001, es decir, el año en que la convertibilidad implosionó.
Y, en términos históricos, se consolida como el tercer retroceso más importante de los últimos 100 años medido con relación al tamaño del producto, según un reciente informe de la Fundación Mediterránea, que estimó la caída en 9 puntos porcentuales respecto del PBI, considerando la evolución de 2009 a la actualidad.
Todo porque los US$ 43.290 millones que atesoraba el BCRA hasta fines de 2102 quedaron reducidos anoche a US$ 33.121 millones, un nuevo mínimo en seis años y nueve meses, pese a que la demanda de dólares del sector privado lleva dos años reprimida con el cepo cambiario y está vigente un generoso blanqueo para divisas no declaradas que, precisamente, buscaba evitar este deterioro constante.
La merma interanual es aún mayor: supera los US$ 12.000 millones desde noviembre de 2012, lo que hace que los economistas hablen de un promedio de pérdida de US$ 1000 millones por mes y haya proyecciones bajo ese supuesto para diagnosticar que el Gobierno deberá introducir correcciones en su política.
"Hay que tener presente que esta caída se registra pese a que el país mantiene una balanza comercial superavitaria en US$ 800 millones/mes. Esto quiere decir en realidad que, por algún lado, se están yendo unos US$ 1800 millones por mes: US$ 1000 millones son por pagos de deuda pública y privada, lo que hace suponer que en eso no podría haber cambios. Pero otros US$ 800 millones se ven por gastos relacionados con el turismo. Eso explica por qué se esperan resoluciones en este sentido", explicó a LA NACION el economista Nicolás Dujvone.
ALTERNATIVAS EN ESTUDIO
El consultor aludió a las medidas que tiene bajo estudio desde hace semanas el Gobierno, a la espera de que la presidenta Cristina Kirchner las apruebe. Suponen un desdoblamiento cambiario oficial, con un dólar más caro para el turismo exterior y el consumo de bienes importados que se juzguen suntuarios.
El abanico de alternativas también contempla la posibilidad de tratar de evitar ese canal de fuga imponiendo un cupo anual de gastos con tarjeta en el exterior, al estilo Venezuela. Pero la urgencia por moderar el drenaje de las reservas hace creer que las medidas llegarán no bien la Presidenta retorne a la actividad pública. Esa presunción se fortaleció ayer luego de que el BCRA convocó de urgencia a su menguado directorio (está en funciones apenas la mitad de los directores que deberían: 5 sobre 10 posibles) para disponer una inédita prohibición para que las cerealeras tomen préstamos en bancos locales (ver Pág. 17).
El objetivo es que estas compañías, responsables de más de un tercio de las exportaciones, prefinancien sus ventas al exterior con créditos obtenidos en divisas fuera del país. Ese ingreso, por normativa, están obligadas a convertirlo a pesos en la plaza local, lo que aportaría dólares privados y permitiría al BCRA correrse del lugar de vendedor nato, al menos por un rato.
Fuente: http://www.lanacion.com.ar/1635827-la-caida-de-reservas-supera-los-us-10000-millones-en-el-ano