La entidad debe determinar el interés de referencia para la economía, dato que fija cada quince días, pero ahora en un contexto complicado en el que la tendencia al alza de la inflación y el proyecto al gravamen a las inversiones no le dan margen a ser flexible
Esta semana el Banco Central determinará nuevamente la tasa de referencia de la economía para fijar el costo de los préstamos, tal como realiza de forma quincenal, pero esta vez será dentro de un contexto complicado.
Hace casi dos semanas la entidad conducida por Federico Sturzenegger mostró que su política monetaria será dura al incrementarla 150 puntos básicos hasta el actual 27,75% anual, después de estar seis meses congelada.
Y todo indica que puede sostener este porcentaje elevado por un tiempo más o, incluso, volver a subirlo.
El panorama presenta tres aspectos que son claves y que explican esta tendencia alcista de las tasas, que pueden generar que se fomente más la bicicleta financiera y un freno a las inversiones de la economía real por el elevado costo de endeudamiento.
Por un lado, las últimas expectativas del mercado respecto a la inflación, difundidas a principios de mes en el informe del REM, no acompañan la intención del BCRA de que los precios disminuyan, ya que indican que hay una tendencia al alza respecto a las proyecciones previas.
La inflación anual esperada para todo el 2017 por los analistas en el relevamiento de octubre es de 23%, un incremento de un punto porcentual respecto al informe del mes pasado (22%).
A ello se suma otro factor, que es el anuncio del Gobierno de impulsar un proyecto para gravar con impuestos a la renta financiera, lo que generaría que se le deba ofrecer mayor rentabilidad a los inversores para compensar esta quita que tendrían en sus utilidades.
Y, finalmente, ocurrió otro hecho que genera que las tasas se mantengan elevadas. Luego de subir la referencia de la economía al 27,75%, este efecto se trasladó a la plaza secundaria para los distintos períodos de las Lebac y pases.
Las Letras de la entidad monetaria a más corto plazo (menos de un mes) pasaron de ofrecer 26,5% en la previa del alza del BCRA al actual 27,25% anual.
Y al más extenso período de las Lebac (257 días) escalaron a 28,60%anual.
Un incremento de casi un punto porcentual respecto a la rentabilidad brindada días previos en todos los períodos de estas Letras.
Renta financiera
El impacto del posible impuesto a la renta financiera que se discutirá en el Congreso, para la City puede llevar a un incremento de los rendimientos de las Lebac.
«Creemos que el anuncio representa un nuevo escollo para la política monetaria del Banco Central. A los precios de mercado actuales, el retorno luego del impuesto del 5% para una Lebac a 35 días caería a 26,1%, un nivel similar al de la semana previa a la suba de tasa», afirma el equipo de Estrategia & Research de Puente.
Por lo tanto aclara que, en este contexto, si días atrás el BCRA estimaba que una tasa del 26% no era lo suficientemente contractiva frente a un proceso desinflacionario más lento de lo esperado, «la pregunta es si las autoridades mantendrán la tasa pese a la caída en la tasa efectiva o si podríamos ver una nueva suba de la tasa».
A la vez esto podría golpear a los plazos fijos, que serán alcanzados por una retención del 5%, por lo que los analistas agregan que la referencia Badlar actual para las colocaciones mayoristas «se volvería negativa en términos reales una vez descontado el impuesto».
El proyecto intenta gravar con una alícuota del 15% sobre los rendimientos netos, descontados variación del tipo de cambio y suba de precios de la economía, de activos denominados en dólares, tales como bonos ajustados por inflación y los títulos dólar linked.
Por otra parte, los residentes argentinos deberán tributar un 5%sobre el retorno de los activos de renta fija en pesos (no contempla a las acciones), tales son los casos de las Lebac, plazos fijos y bonos del Tesoro.
En base a estos datos, desde Puente se concluye que «aún luego de impuestos, el retorno de los activos argentinos continuará resultando muy atractivo respecto a los activos del resto del mundo».
¿Tasas de nuevo al alza?
Para los economistas relevados por iProfesional, está claro que las tasas se mantendrán en el mismo nivel elevado, o incluso más alto, en lo que resta del año.
Incluso, en el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) confeccionado por el Banco Central entre economistas, la media de las opiniones indica que de noviembre a enero la tasa de referencia se sostendrá en 27,75%, un incremento que llega a superar los dos puntos porcentuales respecto al informe del mes pasado.
En consecuencia, se espera que este martes las tasas seguirán en el mismo nivel (27,75%) o que puedan subir algo más.
«No fueron muy buenos los datos inflacionarios, en especial, a las expectativas del REM, que fueron contrarias a lo que esperaba Sturzenegger. Le da poco margen de relajar tasas y puede haber ajuste al alza en la ganancia de las Lebac», dice Federico Muñoz, director de Federico Muñoz & asociados.
Por lo que cree que puede haber una suba este martes, ya que «es probable que la entidad monetaria acompañe al movimiento que hubo en mercado secundario y corredor de pases».
Y agrega que, por el momento, «el impuesto a la renta financiera todavía es un proyecto y no debería afectar a los rendimientos actuales del mercado».
Por otro lado, Federico Furiase, economista asociado del Estudio Bein, considera que el «BCRA va a esperar antes de volver a subir la tasa de referencia, a pesar del aumento de las expectativas de inflación que marcó el termómetro del REM de octubre, porque viene recientemente de subir la tasa de referencia y la curva de rentabilidad de las Lebac».
Es que opina que la «batalla» contra la inflación está complicada: queda por delante el impacto de suba de tarifas en gas, electricidad, prepagas y naftas, en una economía que está creciendo más rápido dando espacio para trasladar a precios la suba de costos.
«Además el déficit fiscal y el crédito siguen bombeando los agregados, mientras el componente de la inercia aceita los mecanismos de propagación de la inflación», resume Furiase.
A ello se suma, en el mediano plazo, el posible impuesto a la renta financiera, lo que debería impulsar al alza la ganancia que se les ofrece a los ahorristas.
En conclusión, el Banco Central se juega su credibilidad y por eso reforzó la señal de tener tasas elevadas para reforzar la credibilidad y anclar las expectativas de la City frente a las negociaciones paritarias que comenzarán a barajarse.-