El mercado laboral de la región mostró un fuerte deterioro, de acuerdo a las cifras difundidas ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Es la tasa más alta desde 2012.
El desempleo afectó al 9,4 por ciento de la población económicamente activa del Gran Rosario al final del segundo trimestre del año. Con una suba tanto en la comparación interanual como trimestral, la tasa volvió a ubicarse cerca de los dos dígitos, en el nivel más alto desde el primer trimestre de 2012.
Entre junio de 2013 y junio de 2014, se sumaron 12 mil personas al ejército de desocupados y 4 mil a los subocupados, de acuerdo a los resultados de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) que fue difundida ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). La ciudad se ubica en tercer lugar, detrás de Córdoba y Bahía Blanca, entre las de mayor desempleo. A nivel nacional, el organismo de estadística también mostró un incremento en ese indicador, de 7,2 por ciento a 7,3 por ciento en un año.
La medición del Indec durante el primer trimestre del año había arrojado resultados sorprendentes respecto de la salud del mercado laboral, al cabo de un trimestre traumático por los bruscos cambios en política económica. La tasa de desempleo informada había sido del 6,7 por ciento, en un contexto de caída de la tasa de actividad y de subocupación.
Esta evolución había contrastado con un fenómeno que se dio durante buena parte de 2013. Si bien el índice de desocupación no se disparaba, aumentaba el subempleo, es decir el porcentaje de ocupados que trabaja menos de 35 horas semanales. Esto fue interpretado como un mecanismo de "amortiguación" de los vaivenes de la actividad económica por vía de la reducción de horas trabajadas, el cuentapropismo y la subocupación.
El segundo trimestre de 2014 exhibe un deterioro del mercado de trabajo en todos sus indicadores. Respecto del mismo período del año pasado, la desocupación subió del 8,2 por ciento al 9,4 por ciento de la población activa. La tasa de empleo pasó de 44,6 por ciento a 43,2 por ciento y la de subocupación se mantuvo prácticamente estable, con una leve suba, de 7,8 por ciento a 7,9 por ciento. La subocupación demandante subió de 5,3 por ciento a 5,8 por ciento y la no demandante bajo de 2,5 por ciento a 2 por ciento.
Este panorama se da en un contexto en el que también cae la tasa de actividad, de 44,6 por ciento a 43,2 por ciento. Esto indica que en términos relativos el mercado laboral del aglomerado se contrajo, al ser menor la proporción de la población total, que tiene o busca trabajo.
Rosario es también la tercera ciudad del país en cuanto a la tasa de actividad, detrás de Córdoba y Ushuaia.
Entre el primero y segundo trimestre de 2014, la desocupación subió 2,7 puntos porcentuales y la tasa de ocupación bajó casi dos puntos, de 45 por ciento a 43,2 por ciento. El subempleo bajó más de dos puntos, describiendo una evolución en la que la reducción de las horas trabajadas se convirtió en un tránsito hacia el desempleo pleno. En el aglomerado hay 116 mil personas con problemas laborales.