La secretaría de Finanzas registró un efecto positivo de la caída de la mayor parte de las divisas en el mundo. En sentido inverso incidió el atraso cambiario sobre los bonos ajustables por inflación.
La deuda de la Administración Pública Central -no incluye provincias y municipios- disminuyó en abril en el equivalente a USD 2.018 millones, luego del salto que acusó en marzo en casi USD 10.000 millones, pese a que la diferencia simple entre las operaciones de “Financiamiento, canjes y emisiones” que sumaron USD 14.475 millones fue similar a la de “Amortizaciones, canjes y cancelaciones” que totalizó USD 14.574 millones, fue de mínima baja de USD 99 millones, según consignó el informe mensual de la Secretaría de Finanzas.
Sin embargo, apareció en el mes un factor externo inesperado que permitió “licuar” parte de la deuda contraída en monedas diferentes al dólar. La apreciación de la moneda de los EEUU en el mundo en un 2,8% en el mes generó diferencias de cambios “negativas” en el equivalente a USD 3.084 millones, de los cuales USD 1.265 millones correspondieron a la contraída con el FMI, la cual junto al pago de vencimientos por USD 709 millones, se redujo de USD 46.632 millones a USD 44.658 millones.
La apreciación de la moneda de los EEUU en un 2,8% en el mes generó diferencias de cambios “negativas” en el equivalente a USD 3.084 millones
Por el contrario, el atraso cambiario en el mercado doméstico, esto es un tipo de cambio que sube notablemente menos que la tasa de inflación del 6,7% en marzo y 6% en abril, determinó que los compromisos nominados en moneda nacional ajustables por CER se elevaran en el equivalente en USD 1.187 millones.
Como resultado de esos movimientos, la deuda total con organismos de crédito internacional que alcanzó un pico de 21,8% del total en agosto 2019, cuando se produjo el último desembolso del FMI del acuerdo que había firmado el gobierno de Cambiemos, se mantuvo en ese rango el trimestre siguiente, hasta que empezó a descender con pagos e interrupción de los giros pendientes (unos USD 13.000 millones) desde el triunfo del Frente de Todos en las PASO y ratificado en noviembre de ese año y registrar un mínimo desde entonces del 18,3% en febrero último, hasta que en marzo 2022 con la firma de un nuevo acuerdo con el FMI y giro neto de USD 6.532 millones se elevó a 19,5%, mientras que en abril volvió a descender, a 19,1% del total
La participación de la deuda con el FMI pasó del 12,4% del total en marzo a 11,9% en abril, por la caída del valor de la moneda del organismo
En ese período, la participación de la deuda con el Fondo Monetario Internacional en el total del financiamiento de la Administración Central pasó de un máximo del 14,1% en agosto de 2019 a 10,9% en febrero 2022, y repuntó a 12,4% el mes siguiente, pero por la caída del 2,8% del valor de los DEG -la moneda del organismo que se define por una canasta integrada, además del dólar (41,73%), por el Euro (30,93%), Yuan chino (10,92%), Yen Japonés (8,33%) y la Libra esterlina 8,09%)-, se redujo a 11,9% del agregado.
Por su parte, la deuda del Tesoro con el Banco Central, a través de Adelantos transitorios que se cancelan y renuevan simultáneamente cada comienzo de año (actualmente en el equivalente a USD 12.879 millones) y Extraordinarios -hasta 10 años de plazo, suman USD 7.718 millones-, pasó de un mínimo de 2,7% del total en agosto de 2019 -venía de 4% en enero de ese año- a un máximo de 6% en enero 2022 y 5,5% en abril.
Muchos economistas tienen la costumbre de “netear” esos compromisos en el balance de las finanzas públicas y concluir que “la Argentina no tiene un problema de solvencia”, porque el incremento del pasivo de un organismo del Estado es acompañado con el aumento del activo de otro. Sin embargo, en ese ejercicio pareciera subestimarse el efecto de esos movimientos no sólo sobre otra variable macroeconómica, con fuerte impacto negativo sobre la microeconomía empresaria y más aún familiar, como es la aceleración de la inflación que genera, como se observa con claridad desde principios del corriente año.
El Banco Central acumuló adelantos al Tesoro Nacional por USD 20.597 millones, y deuda con el sistema financiero por USD 43.269 millones
Destaca un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) que “en abril el Tesoro obtuvo financiamiento neto del Banco Central de la República Argentina (BCRA) mediante el uso de Adelantos Transitorios por $80.000 millones, por lo que el stock aumentó a $2,38 billones a fin de mes”. Y agregó que “además, colocó una Letra del Tesoro en dólares al BCRA por USD 5.674 millones para refinanciar el vencimiento de otra Letra en poder del organismo por igual monto”.
Asimismo, la OPC que dirige Marcos Makón registró en el Análisis y Sostenibilidad de la Deuda Pública -a cargo de Mariano Ortiz Villafañe- el pago de intereses por el equivalente a USD 315 millones, de los cuales 87% se abonaron en moneda nacional.
Por otra parte, la deuda que contrajo el Banco Central con el sistema financiero en su conjunto, a través de la colocación semana de Notaliq y de operaciones de Pases, como instrumentos de absorción de la liquidez derivada del creciente financiamiento al Tesoro Nacional, junto al pago de intereses con un rendimiento que supera a la tasa de devaluación del peso, ascendió en el equivalente a USD 1.175 millones al cambio oficial, a un total acumulado de USD 43.269 millones.
Creciente financiamiento con bonos ajustables
Entre los títulos negociables en el mercado, se destacaron en abril los pagos de Bonte 2026 (TO26) y Boncer 2025 (TC25P) por un total de $10.303 millones (US D91 millones). Las colocaciones de títulos ajustables por CER representaron 44% del total mes a través de licitaciones programadas (y 54% de las emisiones de los primeros cuatro meses del año).
Los títulos en pesos a tasa fija tuvieron una participación de 33%, mientras que los bonos USD linked y títulos en pesos a tasa variable representaron 21% y 3% de las colocaciones del mes, respectivamente.
En abril, 2 de cada 3 pesos de la nueva deuda local se emitió con cláusula ajustable por inflación y por dólar
Desde el inicio de la presidencia de Alberto Fernández, la deuda pública neta de los compromisos asumidos por la Administración Central con el Banco Central, pero con el agregado de la que la entidad monetaria contrajo con el sistema financiero en su conjunto se elevó en USD 76.597 millones: pasó del equivalente a USD 320.335 millones a USD 396.932 millones, a un ritmo de USD 87 millones por día.
Exigencias para el corto plazo
La OPC estimó que los vencimientos de deuda para mayo totalizan el equivalente a USD 8.502 millones, entre los que se cuentan pagos de intereses al FMI por USD340 millones.
Aclara la Oficina de Presupuesto del Congreso que “Al excluir las tenencias intra sector público, los vencimientos se reducen a USD 7.866 millones”.
Además, este mes comenzó la primera revisión del avance del programa de Facilidades Extendidas con el FMI, en la cual se verificará el cumplimiento de las metas acordadas para el primer trimestre del año, en particular en el plano fiscal, el cual de aprobarse por parte del Directorio Ejecutivo del FMI habilitaría un nuevo desembolso por el equivalente a USD 4.017 millones (DEG 3.000 millones) que posibilitará cubrir los pagos con el organismo en el curso de segundo trimestre.
“Entre mayo y diciembre de 2022 la OPC estimó vencimientos de la deuda de la Administración Central por el equivalente a USD 64.782 millones. En su mayor parte corresponde a títulos públicos en moneda nacional, por el equivalente a USD 35.523 millones.
Los pagos de capital e intereses al FMI se proyectan en aproximadamente USD 13.776 millones, los cuales en su mayoría se calzarán con el cronograma de desembolsos trimestrales, previa aprobación del directorio del organismo del cumplimiento de las metas comprometidas en el acuerdo sellado el 25 de marzo último.