La suba del tipo de cambio implica un menor PBI medido en dólares. El último dato disponible del Ministerio de Finanzas indica que era 57% del PBI a fines de 2017
El efecto de la devaluación de las últimas semanas se tradujo en un peso mayor en la deuda como porcentaje del PBI: mientras que el último dato disponible oficial lo sitúa en 57% a fines de 2017, un tipo de cambio más elevado lo hizo subir hasta 6 puntos porcentuales, por lo que hoy, al mismo stock, pesa un 63% del producto. Si además se suman las emisiones de los primeros meses de 2018, alcanza el 65% del PBI, muy cerca del 70% que el Fondo Monetario Internacional evalúa como límite prudente para las economías emergentes.
En un estudio sobre la sostenibilidad de la deuda argentina elaborado por el FMI, el organismo analiza diversos escenarios de cómo impactaría una variación del valor del dólar. De hecho, sostiene que «dada la alta participación de la deuda denominada en moneda extranjera, una variación del tipo de cambio implica una gran vulnerabilidad. El stress test (elaborado por el organismo, que incluye la posibilidad de una depreciación real del 50% con un 0,25 de pass through) muestra que la deuda podría saltar al 66% del PBI en ese escenario, solo un poco por debajo del umbral de alto riesgo».
En línea con lo plasmado por el FMI a fines del año pasado en este documento, con una devaluación en términos nominales de en torno al 34% en lo que va del año, los analistas coinciden que la suba fue de alrededor de seis puntos porcentuales.
«El ratio subió 5,8 puntos porcentuales por la devaluación, aproximadamente. Al incluir nuevas emisiones el total anda por el 65% del PBI», sostuvo el economista Jorge Neyro, de ACM. En lo que va del año contabilizó que, a través del Ministerio de Finanzas a cargo de Luis Caputo, el Gobierno colocó u$s 9000 millones el 4 de enero, a lo que sumó bonos que ajustan por CER, los BOTE y los títulos con cláusula gatillo, y descuentan algunos vencimientos.
Casi el 70% de la deuda pública total (en la que se incluye la intrasector público) está denominada en moneda extranjera, lo que explica la elevada exposición a las variaciones en el tipo de cambio.
Coincidió Nadin Argañaráz, del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), con el número. «Considerando que el stock de deuda era de u$s 321.000 millones a fin de 2017 y el ratio estaba en 57%, sin considerar las emisiones de este año y tomando en cuenta dólar de $ 25, ese ratio se habría incrementado a 63% del PBI», identificó. Y agregó que interesante remarcar, en consonancia con la evolución del stock de deuda, cómo impacta el tipo de cambio en los flujos: los intereses a afrontar suben en $ 30.000 millones, dijo.
Federico Furiase, de EcoGo, hizo el ejercicio de suponer que si se mantiene en porcentaje del PBI la deuda intra sector público, la bruta pasaría de 57% a 64,5%, en un ejercicio que supone que todo el aumento tiene que ver con la deuda pública con el sector privado, Club de Paris y organismos. «En función de nuestras proyecciones de crecimiento (0,9%), dólar promedio de $ 24,25, inflación en torno a 28% y déficit primario de 2,5% del PBI, el ratio de la deuda pública a PBI con el mercado, FMI y Club de París pasa de 28% en 2017 a 35,6% del PBI en 2018, dada la caída del producto nominal en dólares y la alta participación de la deuda en dólares», detalló.
Ramiro Castiñeira, de Econométrica, identificó que se estaba subestimando el stock de deuda porque estaba apreciado el tipo de cambio. «La parte de la deuda quedó casi igual, la parte del PBI, no», agregó.
Y, en la ecuación, si baja el PBI medido en dólares, el ratio de deuda sube. «Todavía no es un número que asuste, pero la Argentina se estaba endeudando a un ritmo que enciende las alarmas de la sustentabilidad», reconoció.