El primer trimestre del año cerró con una devaluación de casi 9% que afectó a las cuentas públicas, cuyos resultados se registran en pesos. Así, los intereses de la deuda dolarizada crecieron 106% nominal y 66% en términos reales. Actualmente más del 80% de la deuda pública con el sector privado y los multilaterales (unos u$s 120.000 millones) está denominada en moneda extranjera
Entre enero y marzo de 2018, los intereses de la deuda externa e interna crecieron un 106% en términos nominales, sin incluir lo que el Banco Central abona por las Lebac que emite. El crecimiento estuvo explicado tanto por las nuevas colocaciones como por la devaluación, que multiplicó los pagos correspondientes a la deuda dolarizada.
Según cálculos de Ecolatina, actualmente más del 80% de la deuda pública con el sector privado y los multilaterales (unos u$s 120.000 millones) está denominada en moneda extranjera. Esto significa que la devaluación del peso durante el primer trimestre (que llegó a casi un 9%) impacta directamente en las cuentas públicas, que se registran en moneda local.
El pago de intereses acumulado saltó de $ 29.293 millones en el primer trimestre de 2017 a $ 60.522 millones en los primeros tres meses de este año (+106,6% interanual).
Al respecto, un informe de Ecolatina señaló: «De hecho, en el primer cuarto de 2017 representaban sólo 0,3% del PBI, mientras que en el acumulado a marzo de este año arrojan un valor de 0,5% del PBI. Asimismo, en relación a los ingresos tributarios, la participación de los intereses pasó de 7% a 12%, respectivamente».
No obstante, desde la consultora aclararon que el número estuvo influenciado parcialmente por un pago del Tesoro al Banco Central que se hizo en diciembre pero se registró en enero.
En términos reales, en tanto, los intereses crecieron un 66,4% interanual durante el primer trimestre de 2018, de acuerdo con los cálculos del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF). La entidad explicó que los intereses de la deuda con organismos multilaterales y privados volvieron a superar ampliamente la velocidad de crecimiento del resto del gasto (el primario) en marzo.
Según indicaron, el origen del incremento estuvo en la nueva deuda en pesos y a largo plazo que debió enfrentar el Tesoro y en las obligaciones en moneda extranjera que se incrementaron parcialmente como consecuencia de la devaluación cambiaria.
En ese sentido, Ariel Barraud, economista de IARAF, agregó: «El efecto de la devaluación en el trimestre fue sobre la parte de la deuda que está denominada en dólares, que aumentó tanto a nivel nacional como provincial. Por otro lado, el rubro de intereses viene creciendo desde hace bastante como consecuencia de la política gradualista. Como no hay una baja agresiva del gasto, se coloca deuda para financiarlo. Sin embargo, todavía no estamos en niveles de endeudamiento preocupantes».
Desde Ecolatina, Lorenzo Sigaut Gravina coincidió: «Argentina se está endeudando a un ritmo elevado porque tiene un déficit de casi 6 puntos del PBI. En el pasado, lo que más se emitió fue deuda dolarizada pero este Gobierno también colocó nuevos títulos en moneda dura. Lamentablemente, en lo que hace al pago de intereses, los datos no discriminan cuánto proviene de deuda en moneda extranjera y cuánto en pesos. De todos modos, es seguro que los intereses de los bonos en dólares y los que ajustan por CER se vieron afectados por la corrección cambiaria».
Con respecto al futuro de este rubro, Ecolatina consideró: «Tras más de la mitad de mandato de Cambiemos, se observan muchos esfuerzos en moderar el rojo primario (pasaría de -3,8% del PBI en 2015 a -3,2% del PBI en 2018), pero un importante crecimiento del pago de intereses (pasaría de 1,3% del PBI en 2015 a 2,5% del PBI para fin de este año)».