Productores listos para trabajar en los campos y camioneros que transportan las cosechas al puerto están reportando racionamiento y aumento de los precios en toda la región pampeana.
La Argentina está lidiando con una escasez de gasoil para impulsar tractores y camiones justo cuando las cosechas de soja y maíz aumentan en la potencia exportadora de cultivos.
Agricultores listos para trabajar en los campos y camioneros que transportan las cosechas al puerto están reportando racionamiento y aumento de los precios en toda la región pampeana, y esta semana se han registrado protestas en las principales rutas de camiones. Argentina es el mayor exportador mundial de aceite y harina de soja y el tercer mayor proveedor de maíz.
Si la cosecha de soja se retrasa, las plantas comenzarían a perder frijoles y rendimiento, según Esteban Copati, encargado de estimaciones de cosecha de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. Los altos precios del diésel, dijo, también amenazan con reducir los márgenes de ganancia que los operadores observan atentamente porque afectan las estrategias de siembra y venta de los agricultores.
Argentina, rica en petróleo, produce mucho gasoil, pero también interviene en los mercados energéticos. En este momento, está tratando de proteger a los argentinos afectados por una inflación de 52% del repunte mundial del petróleo. El crudo local se negociaba en cerca de US$60 por barril en marzo, pese a que los precios internacionales superaban los US$100.
La amplia diferencia ha alentado a los perforadores en Argentina a exportar petróleo en lugar de abastecer a refinerías locales como la estatal YPF S.A., que representa más de la mitad de las ventas del combustible del país, y Raízen. Están compensando el déficit con importaciones que se han vuelto difíciles de conseguir en medio de la guerra entre Rusia y Ucrania.
Hay conversaciones para mantener más crudo en Argentina. Alejandro Lew, director financiero de YPF, dijo en una entrevista del 22 de marzo que intentarán mejorar los precios en el segundo trimestre y que están ejerciendo mayor presión para que las firmas upstream dejen algunos barriles adicionales en el mercado local.
YPF señaló en un comunicado el martes que aumentaría la producción de gasoil en abril y mayo y garantizaría los suministros para la cosecha.
Según una federación de elevadores de cereales de Argentina, aumentar el requerimiento de biocombinación del diésel argentino para que el combustible dependa menos de las provisiones de los perforadores y más del biodiésel elaborado a partir de soja ayudaría a aliviar la escasez. Argentina redujo el requerimiento de mezcla a la mitad el año pasado.