Habrá, eso sí, una menor inversión en cultivos de alta tecnología. La relación con Alberto F.
Una ley no escrita en el campo es que no se deja el lote sin sembrar ni al ganado sin comida. Y aún si gana Alberto Fernández, con un modelo menos inspirador para los productores y que además les genera dudas, se encontrará con una cosecha récord de trigo y buenos volúmenes de soja y maíz temprano. También, con 220 mercados y un cliente como China que se ha convertido en una verdadera aspiradora de la carne vacuna, aviar y porcina. A tal punto, que ya habilitó unas 66 plantas que se suman a las 33 ya autorizadas para exportarles y está comprando frigoríficos como La Gran Muralla en Corrientes que visitará hoy el ministro de Agricultura, Luis Miguel Etchevehere.
En cuanto a los granos, la siembra de trigo que se levanta en diciembre fue mayor en 600.000 hectáreas a la campaña pasada y si el clima acompaña, romperá un nuevo récord. Se prevé que la soja vuelva a superar al maíz a diferencia de lo que ocurrió en la última campaña, cuando el cereal llegó a las 57 millones de toneladas, de las cuales unas 22 millones se convirtieron en carne en la que fue una verdadera ola de transformación en proteína.
Por cierto, antes del resultado de las PASO había una notable intención de siembra de maíz. Se hablaba de unas 500.000 hectáreas adicionales. Los planes cambiaron y ante el temor de una suba de retenciones, muchos decidieron no invertir en un cultivo de alta tecnología como el maíz y se vuelcan a la soja, donde el productor utiliza su propia semilla. En maíz, el costo de la bolsa de semilla llega a los US$ 250 por hectárea.
Hay quienes hablan de una futura relación tortuosa si Alberto Fernández gana las elecciones el domingo. Otros creen que “como necesita los dólares del campo, esta vez será distinto”, según un poderoso productor que tras las PASO elige el anonimato.
Muchos conservan granos sin vender. De acuerdo con el experto Pablo Adreani contabilizan soja, trigo y maíz por unos US$ 8.500 millones. Y lo retienen en parte porque el cepo les impide cambiarlos en dólares. “No hay un corte en la cadena de pagos sino en la de ventas, aunque la opción de comprar insumos hizo que en dos meses se vendieran 7 millones de toneladas de soja”, amplió Adreani a este diario.
“En el campo no hay forma de parar, por eso siempre se sigue adelante. Lo que tenemos que hacer es ponernos de acuerdo como sociedad para un país agroindustrial de largo plazo que produzca valor agregado con los recursos naturales que tenemos”, dice Mariano Bosch a Clarín. Bosch es el CEO y fundador de Adecoagro que invirtió US$ 120 millones en la producción de leche y quesos, con un tambo que está llegando a las 10.000 vacas en ordeñe, además de haber sumado dos plantas y las marcas Las Tres Niñas y Angelita por US$ 45 millones de SanCor y de ser líderes en arroz, maní confitería, azúcar y etanol. ¿Lo escucharán?.