El supermartes estuvo en línea con las expectativas del Gobierno, que esperaba inyectar unos $ 10.000 millones menos. Se renovó el 75% del vencimiento, bastante más que el 60% que pudo ser renovado en junio. Caputo confía en que buena parte del dinero inyectado irá a encajes bancarios, no a inflación o dólar, que suben hoy.
Un nuevo supermartes pasó sin grandes sobresaltos para el Banco Central (BCRA) gracias a la estabilidad cambiaria de las últimas semanas. La entidad que conduce Luis Caputo logró renovar el 75% del vencimiento de $ 529.000 millones, con lo que inyectó al sistema unos $ 152.000 millones en el día, apenas algo más de lo que estimaban en el Gobierno en la víspera y que la autoridad monetaria confía en sacar de circulación en gran parte a través de subas de encajes bancarios y operaciones con Leliq y pases pasivos. La tasa a la que se fijó la letra más corta con vencimiento en agosto fue de 46,5%, medio punto porcentual por debajo de la que tuvo que convalidar el mes pasado y más de 7 puntos menos que los máximos alcanzados por ese papel en el mercado secundario en días pasados.
El BCRA marcó una tasa nominal anual del 46,5% para las Lebac a 28 días, en línea con la que se operaba en el mercado secundario para el mismo vencimiento. Según informó la propia entidad, el monto renovado fue de $ 393.862 millones, algo por encima de lo que esperaban el mercado y la propia autoridad monetaria.
El Central recibió ofertas por un valor nominal de $ 399.216 millones. Esta semana vencían alrededor de $ 529.321 millones millones en Lebac, poco más del 50% del stock total de esas letras. La reducción en el stock de Lebac fue de $ 135.459 millones, con lo que el BCRA superó levemente su objetivo de inyectar unos $ 140.000 millones al mercado. La expansión monetaria resultante de la operación de ayer terminó siendo de $152.273 millones, lejos de niveles que pudieran causar sobresaltos graves en el mercado cambiario.
«Desde inicios de la semana pasada se observó en el mercado secundario una baja sostenida de tasas de Lebac desde el 53% al 46,50% operado al cierre de la jornada de ayer (por el lunes) para el plazo más corto (se replicó un comportamiento similar para todos los plazos). En este contexto el BCRA enfrentaba vencimientos por $ 529.321 millones y, no obstante la baja de tasas, colocó $377.047 millones», resaltó un banco en un mail.
Además de la renovación, se debe tener en cuenta que una parte del dinero que abandonó las Lebac saldría del mercado por efecto de las subas de los encajes bancarios (casi $ 50.000 millones ya fueron el lunes a la ampliación de la emisión de los Bonos del Tesoro 2020 Bote 2020 que hizo el Gobierno, y que los bancos pueden utilizar para cubrir el encaje de depósitos al que los obliga el BCRA).
Fuentes del mercado señalaron que los bancos renovaron menos Lebac de lo que se estimaba un día antes. Fueron unos $ 115.000 millones los que las entidades financieras deshicieron para cumplir con normas de encajes, contra $ 80.000 millones que se esperaban.
El resto de la expansión se atribuía a un aumento de la demanda de dinero propia de las vacaciones de invierno.
Ayer en la entidad de la calle Reconquista confiaban en que el nivel de expansión monetaria podría ser esterilizado en unas 48 horas mediante operaciones con Lebac, Leliq una especie de Lebac a 7 días de plazo que sólo pueden operar los bancos y pases pasivos.
Hoy, día de vencimiento de las Lebac las licitaciones se hacen un día antes del vencimiento empieza a regir un aumento de dos puntos porcentuales a los encajes bancarios (la parte de los depósitos que los bancos deben inmovilizar y que, por lo tanto, no son pesos que circulen en la economía y que pueden cebar la demanda de dólares o empujar al alza a los precios). El BCRA estimó en el pasado que cada punto de encajes saca de circulación unos $ 20.000 millones. La suba de hoy se suma a dos previas, de 3 puntos cada una, hechas en el último mes.
«No fue una mala licitación para el BCRA, después del desarme fuerte del mes pasado», dijo un operador bancario. «Pudo bajar la tasa después de haberla sostenido hasta en 53% en el mercado secundario, la inyección no es grande y camina en dirección a la reducción del stock; va a ser interesante mirar en las próximas semanas como se mueve la tasa en el mercado secundario, porque si manejan agregados monetarios lo esperable es que haya volatilidad de tasas», agregó.
En la licitación de junio el BCRA había inyectado algo más de $ 220.000 millones al mercado tras lograr renovar apenas el 60% del vencimiento. La renovación ayer implicó una mejora al alcanzar el 75% del vencimiento.
El corto plazo volvió a ser el más elegido: el 84% de las suscripciones se concentró en la Lebac a un mes, mientras que los otros tres plazos (se licitó una letra menos de lo habitual) se repartieron el resto. En junio el 78,6% de las posturas se habían quedado en la letra a un mes.