En medio de la fuerte polémica que mantiene con la dirigencia gremial que reclama la sanción de una ley antidespidos, el Gobierno apuró ayer el anuncio del proyecto que enviará en las próximas horas al Congreso para fomentar la inserción de los jóvenes de entre 18 y 24 años al mercado de trabajo, mediante el subsidio de las contribuciones patronales por un período de tres años, beneficio que significará para las empresas una rebaja de hasta el 34% del costo laboral.
La iniciativa, denominada plan «Mi Primer Empleo», fue oficializada ayer por el presidente Mauricio Macri, quien sostuvo que se trata de una medida enmarcada en «la tarea fundamental de mi gobierno que es generar trabajo». Todo un mensaje dirigido a las centrales gremiales y los sectores de la oposición política que presionan por la aprobación legislativa de una herramienta que reimplante la doble indemnización para sancionar los despidos.
Si bien el texto definitivo del proyecto que Macri pretende enviar hoy al Parlamento era definido anoche por la Secretaría Legal y Técnica, funcionarios del Ejecutivo explicaron a este diario que la iniciativa apunta a facilitar el acceso al primer empleo a los jóvenes de entre 18 y 24 años y fomentar la formalización laboral de aquellos trabajadores de mayor edad que no están registrados y desempeñan tareas en el marco del llamado Plan Belgrano, que busca reactivar el empleo en las provincias del NOA y NEA. Para ello, el Estado subsidiará el pago de las contribuciones patronales de aquellas empresas que contraten nuevos trabajadores bajo el nuevo régimen.
El beneficio, que se extenderá durante los primeros 36 meses de relación laboral formal del nuevo empleado, prevé que el porcentaje de exención de las contribuciones y los incentivos irá disminuyendo durante ese período y que el subsidio será mayor para las pymes que para las grandes empresas. Al respecto, las fuentes oficiales explicaron que las compañías de hasta 200 empleados quedarán exceptuadas del 100% de las contribuciones durante el primer año de contrato del nuevo trabajador, beneficio que alcanzará al 60% de esos pagos en el segundo año y se reducirá al 40% entre los 25 y 36 meses, porcentajes que se aplicarán en los casos de empleados que perciban sueldos hasta el equivalente a 1,5 salarios mínimo ($ 9090). En el caso de las grandes firmas (más de 200 trabajadores), la excepción inicial de contribuciones será del 80% y se reducirá primero al 40% y luego al 20% en el último año del régimen.
Según las estimaciones oficiales, los beneficios propuestos por el Ejecutivo implicarán para las empresas una reducción de hasta el 34% de sus costos laborales.
El proyecto, además, sugiere a las aseguradoras del sistema de ART, a las obras sociales y gremios que acompañen el régimen mediante la absorción total o parcial de sus cuotas.
Desde el Gobierno estimaron que con el nuevo régimen lograrán incorporar entre 200 mil y 230 mil nuevos trabajadores por año al mercado formal de empleo, la mitad de los cuales se concentraría en las provincias del Plan Belgrano, mientras el resto correspondería al universo de 750 jóvenes que en la actualidad ni trabajan ni estudian.