La oleaginosa volvió a los valores de hace casi 3 meses, tras mejorar 6% en menos de una semana. El clima en EE.UU. fundamental en la mejora, que seguía en la rueda continua
Los futuros de la soja arrancan la semana en el mayor valor en casi tres meses, y al borde de superar los u$s 500 por tonelada, ante pronósticos climáticos adversos para la campaña en Estados Unidos, con cultivos en plena etapa de crecimiento y clima más caluroso y seco que lo recomendado que derivaría en una producción menor a la estipulada.
El cierre del viernes encontró a la oleaginosa en Chicago a u$s 488 por tonelada para la entrega en noviembre, con lo que en apenas 5 ruedas ganó 6%. La mejora se extendía anoche, durante la rueda continua, donde el contrato con vencimiento en noviembre se negociaba a u$s 500 la tonelada.
La suba con la que arrancaba la rueda electrónica fue reflejo inmediato de inversores al reporte de la entidad de agricultores norteamericanos (Professional Farmers of America). Tras realizar un relevamiento de los cultivos, ProFarmers consideró que la producción sojera de Estados Unidos puede ser hasta 3% por debajo de la estimada por las autoridades.
El informe de los agricultores se difundió el viernes a última hora, cuando Chicago ya había cerrado las operaciones. Y se dio luego de una semana en la que se registraron temperaturas por encima de lo esperado por el mercado, incluso por el Departamento de Agricultura estadounidense (Usda) en su reporte de principios de agosto, y falta de lluvias copiosas en buena parte de las zonas productivas de EE.UU.
Así, el poroto, que es el principal cultivo y producto de exportación estrella argentino, terminó la semana pasada con un alza de 3,2%, hasta u$s 488 la tonelada, el mayor valor desde el 7 de junio último, cuando el contrato más activo había cerrado a u$s 489 la tonelada.
Con el flamante raid alcista, la oleaginosa recuperó 14% de lo que había resignado entre fines de julio y principios de este mes, cuando tocó su mínimo de operación de los últimos 18 meses: u$s 427 la tonelada, el pasado 7 de agosto. Esos 60 dólares por tonelada de mejora entre el mínimo de principios de mes y el cierre del pasado viernes implican que la cosecha argentina 2013/14 –que todavía no comenzó a plantarse– se revaluó u$s 3.000 millones.
No obstante las alzas de las últimas ruedas, el valor internacional de la soja está bien lejos de repetir la performance del año pasado, cuando a principios de septiembre marcó un récord histórico: u$s 650 la tonelada, en medio de un clima adverso que diezmó la cosecha norteamericana. Los precios actuales son 25% inferiores a los de un año atrás.
Este año no está en dudas que la cosecha en EE.UU será más que buena, incluso récord, pero el factor climático juega por estos días con el nerviosismo de los operadores, inversores y fondos especulativos.
En ese sentido, el informe de oferta de ProFarmers expone que los cultivos, tanto de soja como de maíz, estuvieron sujetos a demoras importantes en la siembra, además de clima más frío de lo habitual al principio, falta de lluvias y calor en etapas claves, lo que determinaría rindes más bajos de lo previsto.
Las producciones de soja y maíz previstas por ProFarmer están por debajo no solo de las informadas a principio de mes por el USDA, sino también de lo que estimaba el mercado.
“El clima de los próximos 45 días tendrá mucho impacto en los rindes que el clima que hubo hasta el momento”, señaló el reporte de la entidad. Que consideró que “hay potencial para una buena campaña, aunque también un riesgo significante”.
En ese sentido, un reporte del climatólogo Dan Hicks, mencionado por la agencia Bloomberg y difundido la semana pasada sostiene que las temperaturas de este ciclo son “similares a las de 1996 y 1908” y que en esas campañas hubo heladas a fines de septiembre y principios de octubre que dañaron muchos cultivos.