La Bolsa de Comercio de Rosario analizó el avance de la oleaginosa deflactado. El trabajo abriga «la esperanza de una recuperación» del poroto al compararlo con otros productos
En medio de la creciente preocupación de los productores agrarios y de la cadena agroindustrial ante la fuerte baja del valor internacional de la soja durante esta campaña, que hoy ronda el 25% interanual, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) evaluó el comportamiento que tuvo la oleaginosa en los últimos 17 años y comparó su evolución con otros commodities, tanto en términos nominales como en términos reales.
Y los resultados a los que arribó el trabajo encarado por Julio Calzada y Guillermo Rossi (una actualización de un informe efectuado hace dos años) pueden sorprender a más de uno, sobre todo porque la soja se constituyó en el principal producto de exportación local y en la fuente más importante de ingreso de divisas en la década kirchnerista.
El análisis impacta: «En los últimos 17 años, la soja ha sido uno de los productos que registró menores aumentos de precios». Se lo comparó con varias materias primas agropecuarias, energéticas e índices de alimentos y insumos industriales «relevantes».
La conclusión a la que arriba el trabajo de la Departamento de Estudios Económicos de la BCR es que en términos nominales, el precio de exportación de la soja creció 72,8% en los últimos 17 años. «l precio ha venido creciendo ?en términos nominales? al mismo ritmo anual que la tasa de inflación estadounidense del 2014. Parecería ser que los valores han aumentado muy poco teniendo en cuenta la aparición de la fuerte demanda china en este período», sostiene el trabajo.
Cuando el análisis se realiza en términos reales, es decir sin inflación, esa mejora desde 1998 a junio último se reduce a 18,1%.
En términos deflactados, en el mismo lapso, aumentaron mucho más el petróleo (220%); el oro (174%); el cobre (140%); la plata (98%); la urea (140%); el fosfato diamónico (58,8%); el Índice general de precios de mercaderías que estima el FMI (81%); la carne vacuna (70%); frutas (29%), carne de pollo (25%) y el Índice de precios de insumos industriales (24%).
Dos productos analizados, sobre la base de los datos del Oil World Statistic update, tienen precios en términos reales por debajo de lo que valían en 1998: el gas natural (9% de caída) y el Aluminio, con una baja real de 15,1%.
Al volver al poroto, la BCR pone énfasis en que en términos reales, la soja tuvo «una tasa anual de crecimiento real acumulativa de 0,5%».
Tanto «en términos nominales y reales en estos 33 semestres, el precio de exportación de la soja tuvo un aumento sumamente bajo y moderado» en medio de la aparición de la fuerte demanda china en ese período.
El trabajo concluye que «el estar el crecimiento del valor de la soja por debajo de muchos insumos, productos e índices de la economía mundial, es una buena noticia para los argentinos, que dependemos crecientemente de las exportaciones del complejo sojero».
«Nos permite abrigar la esperanza de que se puede efectivizar alguna recuperación en los precios de la oleaginosa en un futuro cercano», manifestó la BCR.
