En la jornada los granos tuvieron una caída generalizada luego que volviesen a retomarse las exportaciones de Ucrania.
Los granos cerraron este lunes con retrocesos en el mercado de Chicago como consecuencia, principalmente, de la reactivación de las exportaciones ucranianas que se encontraban paralizadas desde el inicio de la guerra con Rusia en febrero.
Así, la soja frenó su racha alcista y perforó los u$s600 por tonelada. De esta forma, el contrato de agosto de la oleaginosa descendió 2,6% (u$s15,71) hasta u$s585,79 la tonelada, mientras que la posición septiembre aumentó 3,7% (u$s20,30) para concluir la jornada a u$s526,17 la tonelada.
En la misma sintonía, el maíz retrocedió 1,5% (u$s3,64) y se posicionó en u$s238,96 la tonelada, con lo que cortó una racha positiva de cinco jornadas.
Y el trigo decreció 0,92% (u$s2,76) y cerró las operaciones en u$s294,04 la tonelada, debido también a la concreción de la primera salida de un buque cargado con granos desde el puerto ucraniano de Odesa.
«Las bajas, que fueron producto de una toma de ganancias de los inversores tras las fuertes subas recientes, tuvieron entre sus argumentos el despacho desde Ucrania del primer barco cargado con granos desde el inicio de la guerra», sostuvo la consultora Granar.
También incidieron en los precios, la ratificación de Indonesia de su decisión de incrementar las exportaciones de aceite de palma, y una caída en torno del 5% del valor del petróleo.
Así, los precios de la soja cerraron en baja luego de seis jornadas positivas seguidas.
Por su parte, los subproductos de la soja, en tanto, acompañaron la tendencia negativa, con una merma de la harina de 1,7% (u$s9,15) hasta u$s536,82, y una baja en el aceite de 3,5% (u$s52,25) para concluir la jornada a u$s1.460,10 la tonelada.
Al igual que en el caso de la soja, las pérdidas respondieron, fundamentalmente, a que «los fondos de inversión optaron por un parcial retiro de ganancias tras la noticia del primer despacho de un buque cargado con más de 26.000 toneladas de maíz desde el puerto ucraniano de Odesa, sobre el Mar Negro, desde el inicio de la guerra, el 24 de febrero pasado», señaló Granar.