«La mesa estaba servida, pero no hubo brindis». Esta frase de un operador es la síntesis del escenario actual en el mercado de bonos y acciones
El buen clima que se observa en los inversores del resto del mundo, congruente con la nueva suba de la nota de la calificadora Moody’s, no se corresponde con otra caída de la Bolsa, la tercera consecutiva; la suba del tipo de cambio de pesos por dólar; y el aumento de las tasas de las Lebac.
Estos fueron los buenos datos que fueron recibidos con cautela, a pesar de ser positivos:
* Moody’s mejoró la nota de la deuda soberana argentina;
* El PBI, el tamaño de la economía, alcanzó los niveles de junio de 2015, es decir recuperó toda su caída;
* La industria creció por sexto mes consecutivo. Es vez lo hizo 2,7%;
* Por quinto mes creció el empleo en blanco;
* Una de las encuestadoras más prestigiosas, recogió la opinión de los empresarios: 70% prevé un 2018 mejor.
Pero estos datos son opacados por otros. En público los empresarios elogian al presidente. Los inversores, en cambio, votan con sus movimientos en los mercados. Ellos detuvieron sus apuestas.
* Quieren ver qué sucede con las reformas tributarias, previsionales y laborales.
* Esperan ver cómo resuelve el conflicto con un sector de los Mapuches y como enfrenta a los gremios y organizaciones políticas y sociales que se oponen con huelgas y marchas a los cambios que se anunciaron;
* Se conversa como un susurro, pero sería cínico no comentarlo, saben que se viene un «lavajato» argentino que va a involucrar a empresarios. La duda es a que empresas va a perjudicar. Por eso en la Bolsa no se mostraron tan confiados como en el pasado. Puede haber alguna sorpresa.
Balance del mes
A un día de finalizar noviembre, el dólar al público en bancos y casas de cambio, subió 7 centavos a $17,70. En cambio el «blue» perdió 5 centavos y cerró a $18,10. Como se sabe, las principales «cuevas» están en el centro de la ciudad –»La City»- que fue afectada por las marchas y los cortes. Como los que operan en esta plaza lo hacen exclusivamente al contado, nadie quiso asumir riesgos.
El dólar «hoy» como se llama al interbancario o mayorista, movió USD 737 millones. Abrió a $17,40 y a la mitad de la rueda subió a $17,42 para luego cerrar a $ 17,425, casi siete centavos por arriba del promedio previo.
Las reservas del Banco Central bajaron USD 101 millones, a USD 54.663 millones. La pérdida se explica por las variaciones cambiarias en el resto del mundo y del oro, impactaron en USD 30 millones; y porque se pagaron USD 10 millones de un vencimiento del Bonar 2018 a residentes del exterior y se cancelaron USD 5 millones con Brasil para compensar operaciones de comercio exterior.
En el mercado de bonos de la deuda, los negocios se elevaron considerablemente y triplicaron a los del lunes. Se operaron $15.319 millones. El Bonar 2024, el título de referencia, aumentó 0,50%acompañando la suba del dólar. Las Lebac subieron sus tasas de manera notable. La que tiene plazo remanente de 20 días incrementó su rendimiento en 0,35 puntos, a 29,20% anual.
La Bolsa, fue el reflejo más fiel del humor del mercado. Y con el monto de negocios de $416 millones, que es la mitad de lo que se negociaba hasta hace dos semanas, dejó un mensaje claro: «hasta acá llegamos, ahora esperamos los avances». Por eso, la baja del Merval fue de tan sólo 0,03%después de haber iniciado la rueda 0,5% arriba.
Petrobras con caída de 3,28%, que tiene la más alta ponderación en la confección del Merval, fue la principal culpable del cierre negativo. Termina el mes con dudas. Nadie quiere moverse de donde están. Lo positivo es que si bien la cautela no deja subir las acciones, tampoco las derriba.