Este jueves, las criptomonedas vuelven a la senda bajista y la incertidumbre (y la preocupación) reina en el mercado. Las caídas superan el 12% y se teme por el soporte de Ethereum.
Bitcoin se desprende de su zona de soporte y se derrumba por debajo de los u$s37.000, operando en los u$s36.000 con una caída superior al 2%. Este jueves, las criptomonedas vuelven a la senda bajista y la incertidumbre (y la preocupación) reina en el mercado. De las diez principales criptomonedas del mercado, las caídas alcanzan el -12% liderado por Solana (-12%), Polkadot (-6%), Ethereum (-4%) y Terra (-4%).
El Bitcoin se mantiene incapaz de sostener su rebote hasta el precio objetivo de u$s40.000 y se mantiene en sintonía con el desplome del sector tecnológico de Wall Street. Los resultados de Meta (Facebook) publicados tras el cierre decepcionaron a los inversores y la red social acabó las operaciones extendidas en EEUU con una caída de casi un 23%.
La moneda digital dejó un mínimo desde el 25 de enero en u$s36.800 y los expertos empiezan a preguntarse si las opciones de que alcance el objetivo de u$s40.000 no son más que un acto de deseo.
El rebote del Bitcoin fue alentador durante la última semana, pero hasta ahora no logró recuperar esta importante resistencia, «lo que puede causar cierto malestar entre los que esperan que el mínimo haya quedado atrás», comentó Craig Erlam, analista de Oanda en Bolsamnía. «La mejora en el apetito por el riesgo en los mercados más amplios está apoyando naturalmente el precio y podría ser en última instancia lo que lo lleve a través de este importante nivel de resistencia, siempre y cuando se mantenga», agregó pero puntualizó que «estamos viendo una toma de beneficios que está contribuyendo a las caídas de corto plazo».
Los expertos avisan de que las decisiones de los bancos centrales de este jueves marcarán el compás de los criptoactivos ya que “el Bitcoin seguirá cotizando como un activo de riesgo y probablemente se beneficiará si siguen mostrando cierta reticencia a la hora de endurecer su política monetaria”, explicó Edward Moya, analista de Oanda. En este sentido, cree el experto que el Banco de Inglaterra y del Banco Central Europeo podrían tener un impacto mayor de lo normal en las criptomonedas, “ya que Wall Street está buscando una señal sobre la dirección en la que se dirige el apetito por el riesgo”.
La Reserva Federal (Fed) señaló la posibilidad de múltiples subidas de tipos este año. Esto hizo que los activos de riesgo, como las acciones tecnológicas de alta valoración y la mayoría de las criptomonedas, sufran fuertes ventas.