Se aceleró la liquidación de divisas del sector en la última semana. Las ventas se amesetarán en mayo, y tomarán un nuevo impulso entre junio y agosto
Con la cosecha de soja ya lanzada, aunque demorada por las últimas lluvias, abril será un mes movido en materia de comercialización de granos.
Según un informe del especialista y ex dirigente rural, Néstor Roulet, los permisos de exportación (ROE) otorgados a las grandes traders que operan en la Argentina rondarán las 8,2 millones de toneladas este mes, un récord histórico para ese mes.
El movimiento de abril coincide con el ingreso de la cosecha, la necesidad de las empresas de “generar” granos desde la Argentina para cubrir sus compromisos de entrega internacionales y la necesidad de los productores de vender para completar pagos de insumos y demás gastos financiados a cosecha.
Solamente el monto autorizado en abril para exportar al exterior está valuado en u$s 4.500 millones, según el informe, en función del valor FOB (mercadería puesta en puerto) que sintetiza el valor del poroto, el aceite y la harina de soja en partes proporcionales según se envía al exterior.
Si se suma el mes de mayo, cuando las autorizaciones de venta serán de 3,6 millones de toneladas, el resultado indica que en los próximos dos meses se permitirá exportar un cuarto del total de ventas externas del complejo sojero comprometido para el año, de 44,25 millones de toneladas de soja y derivados, sobre una cosecha total que será cercana a los 55 millones de toneladas.
El trabajo estima unas 5 millones de toneladas de soja para el consumo interno, más un 10% de la cosecha que los productores se guardan para vender en el próximo ciclo.
Resta ver el impacto de las últimas lluvias en el rendimiento final de la soja, que al mismo tiempo podría tener una demora en la cosecha de alrededor de una semana en algunas zonas, hasta que el agua permita reanudar las tareas, si es que deja de llover.
La Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), anunciaron que la liquidación de divisas en la última semana ascendió a u$s 625,5 millones, mientras el monto liquidado desde comienzos de año hasta el viernes pasado alcanzó los u$s 5.054 dólares.
El proceso, que traía un buen ritmo, se aceleró en el último mes debido a que los exportadores anticipan la liquidación de divisas unos 30 a 90 días previos a la exportación efectiva. Es decir que la expectativa de envíos récord en abril motivó la inyección de dólares que resultó un arma fundamental para contener el tipo de cambio local.
La plaza cambiaria atestigua el movimiento. Ayer, el dólar ‘blue’ bajó a $ 10,30 y el Banco Central salió a comprar unos u$s 120 millones para equilibrar el mercado, con lo que además recuperó reservas.
La necesidad de monetaria del sector agrícola marcará otro impulso de autorizaciones de ventas en junio, cuando alcanzarán las 4,7 millones de toneladas; julio, con 6,3 millones de toneladas y agosto, con otras 4,7 millones de toneladas, según el informe. Es de esperar que la liquidación de divisas del sector exportador se mantenga firme, aunque decae a partir de septiembre y octubre para ser muy bajas en agosto y septiembre.