Las necesidades financieras de las provincias ascenderían a un monto de entre $35.000 a $42.000 millones. La Nación, en tanto, les refinanció las deudas e impulsa en endeudamiento en el exterior.
Aun con la reprogramación de las deudas que las provincias mantienen con el Estado Nacional, este año las necesidades financieras de las provincias oscilarán entre los $35.000 millones y $42.000 millones, según las estimaciones de las consultoras privadas.
Nadin Argañaraz y Ariel Barraud, del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), con un escenario de estanflación, estiman que el déficit de las provincias podría ubicarse alrededor de los $10.500 millones. Luego del pago de intereses, el resultado financiero sería negativo en $19.500 millones. Y bajo el supuesto de una refinanciación total de los $10.000 millones de servicios de la deuda con Nación para todo 2014, las necesidades de financiamiento rondarían los $35.000 millones, el 0,9% del PBI.
Por su parte, Economia & Regiones señala que las necesidades financieras de las provincias ascenderían este año a unos $41.800 millones, “una cifra muy compleja para financiar, más aún teniendo en cuenta el contexto de encarecimiento del crédito interno, menor liquidez local y reducido margen para hacer colocaciones en los mercados de deuda internacional”.
Por eso, muchas provincias sostienen que debería rediseñarse el esquema de coparticipación federal de modo de nivelar los fondos que se reparten entre la Nación y las provincias. Más concretamente plantean rediscutir el 15% de la masa coparticipable que se destina a la ANSeS, que no se justificaría tras la estatización de las AFJP, y la coparticipación integral del impuesto a los débitos y créditos (“al cheque”).
IARAF descuenta que según los presupuestos y/o emisiones ya autorizadas o realizadas, las provincias podrían obtener financiamiento por unos $25.000 millones, quedando un “bache financiero a cubrir del orden de los $10.000 millones”.
“Para cubrir dicho bache, la vía de los aumentos tributarios está muy acotada pues se llegó a un límite de presión fiscal, y la de más ajuste, a través de mayor control del gasto, no pareciera ser una estrategia a repetir este año. Eso seguramente se buscará cubrir con emisiones de deuda adicionales a las ya presupuestadas o planeadas, o bien mediante algún ingreso extra proveniente del orden nacional que tiene su propio bache financiero”, agregan Argañaraz-Barraud.
En lo inmediato, por la inflación y la falta de ajuste por inflación de Ganancias, las transferencias automáticas a las provincias tuvieron una buena performance durante los primeros 4 meses de este año. El total distribuido fue de $84.375 millones, un 38,8% superior a lo coparticipado en igual lapso de 2013. Además por la devaluación del peso, en abril, las transferencias del Fondo Sojero llegaron a los $3.355 millones, “casi duplicando el récord anterior de abril de 2013” y “superando la suma de lo girado durante los seis meses anteriores”, según E&R.
Por esta razón, y por el giro económico más ortodoxo que dispuso el Gobierno, el Ejecutivo impulsa a las Provincias a que tomen deuda, en especial en dólares, para aumentar la oferta de moneda extranjera. Un caso es la Provincia de Buenos Aires que tiene autorización en el Presupuesto para emitir deuda por $14.500 millones y ahora podría colocar bonos por unos US$1.000 millones, a una tasa levemente por encima del 10% anual.
Fuente: http://www.ieco.clarin.com/economia/provincias-frente-complejo-panorama-fiscal_0_1136286710.html