Los activos argentinos sufren fuerte la incertidumbre cambiaria. El mercado está más atento a que el dólar se estabilice que a la chance de volver a ser emergentes
La inestabilidad en el mercado cambiario ya le pegó fuerte a las acciones y los bonos. En lo que va de 2018, el Merval cayó 33% en dólares y el riesgo país trepó 203 puntos básicos y alcanzó su nivel más alto desde la salida del default.
Tras el 28D la Argentina perdió la confianza de los inversores y el mercado pide señales de solidez económica. Ni la salida de Federico Sturzenegger del BCRA el jueves pasado logró revertir, por lo menos en lo inmediato, el malhumor de los mercados.
Ahora la expectativa de quienes invierten en acciones locales está puesta en lo que pueda pasar este miércoles con la decisión de MSCI de reclasificar al país como mercado emergente y en tanto, el segmento de renta fija está atento a señales de estabilidad cambiaria, que esperan, lleguen pronto.
«La caída del 33% en dólares del Merval en lo que va del año puede ser vista como un atractivo punto de entrada para los inversores», señaló Nery Persichini, gerente de inversiones de GMA Capital. «La renta variable está necesitada de drivers positivos que puedan servir en el corto plazo como un punto de inflexión para cambiar la tendencia lateral del mercado», dijo.
Analistas de Delphos sostuvieron que la crisis cambiaria puede «tapar» la eventual buena noticia de el reingreso al mundo emergente. «La recuperación o no de la bolsa local depende más de solucionar la situación actual que del MSCI. Este último sólo logrará modificar los porcentajes de suba o baja según el caso», dijeron.
Por el lado de renta fija, los bonos en dólares continúan muy golpeados y la noticia del cambio de autoridades del Banco Central no produjo el rebote esperado. Entre los títulos en dólares (que cotizan en pesos), el bono a 100 años perdió un 0,2%; el Argentina 2037, un 0,6%; el Bonar 2024, un 0,7%. La excepción fue el Bonar 2020, que aumentó un 1,2%. A la par, los bonos en moneda dura nominados en divisas se hundieron hasta 2,9%.
«La incertidumbre del tipo de cambio le está bajando valor a los bonos y de esta manera los deja en un rendimiento bastante atractivo», señaló Ramiro Marra, de Bull Market.
Así las cosas, el riesgo país, que mide la banca JP Morgan trepó un 15% en las últimas cinco ruedas y cerró el viernes en 551 puntos, su punto máximo en dos años.
Otro dato que sirve para monitorear la confianza del mercado en la Argentina son los CDS, los Credit Default Swaps, seguros para cubrirse por el riesgo de impago de la Argentina. La prima de riesgo por default del país alcanza por estos días los 531 puntos, su máximo valor desde 2015.
Pese al acuerdo con el fondo y los cambios en el Gabinete de Macri, tanto si se lo mide por el Embi + de JP Morgan o por los CDS, pareciera que Argentina luce a los ojos de los inversores extranjeros más riesgosa que su par comercial Brasil. El viernes, el riesgo país brasileño cerró en 333 puntos, lo que marca un spread de más de 220 puntos entre ambas economías.
«El riesgo país de Argentina está con mucha volatilidad, si lo comparamos con el de Brasil que está en máximos, pero con una clara tendencia hacia arriba», señaló Marra.
«El mercado está impaciente: busca una fuerte señal fiscal que pueda llevar calma en este momento de inestabilidad cambiaria», afirmó Persichini. «Creo que tras el acuerdo de u$s 50.000 millones con el FMI hay dos opciones: o el mercado cree que no es sostenible, o el riesgo país no debería estar tan alto. En este sentido, creo que hay una sobre reacción con Argentina».