Las entidades sumaron $ 46.000 millones en 2014, un salto de 58% promedio para las entidades privadas. La banca pública representó un 40% del total. Las tenencias de activos en dólares y la apuesta por las Lebac, la clave
Los bancos ganaron más pero su negocio principal rindió menos. Detrás de los resultados ?elevados en términos nominales? que obtuvieron los bancos en el periodo de 2014, conviene poner la lupa sobre la intermediación financiera para tener una idea acabada sobre la salud del sector. En los hechos, y en lo que es un dato que ha generado inquietud en las entidades financieras, durante 2014, tanto el crédito como los depósitos del sector privado cayeron en términos reales. Según los especialistas consultados, estos resultados derivaron de la política monetaria «contractiva» que implementó el BCRA para contener las presiones cambiarias.
Por sexto año consecutivo el sector financiero cerró con un resultado positivo: en 2014 las entidades presentaron ganancias por $ 46.000 millones, lo que significa un incremento nominal de 58% anual respecto de 2013 ($ 29.000 millones), claramente por encima de la inflación. Parte de esta mejora real estuvo impulsada desde la banca pública: su participación dentro de las ganancias pasó de 38% en 2013 a aproximadamente 40% el año pasado.
Ahora un informe de la consultora Ecolatina saca cuentas y concluye en que la rentabilidad de los bancos trepó fuerte gracias a la tenencia de activos, en detrimento de la intermediación financiera (principal fuente de ingresos de las entidades bancarias), que se vio reducida en 2014.
La rentabilidad en relación al activo de las entidades (ROA), mostró un incremento de 0,6 p.p. (4,3%); y la rentabilidad sobre el patrimonio neto (ROE), pasó de 29% a 32% en el acumulado a diciembre, exhibiendo una suba de 3 p.p. en 2014.
«Estos resultados lucen contradictorios ante la deficiente evolución de los préstamos y los depósitos a lo largo de 2014 y más aún con las regulaciones que implementó el BCRA en el último año en torno a las tasas de interés, al establecer un piso al rendimiento de los plazos fijos y fijó un tope sobre las tasas de los préstamos que acota el spread bancario», señaló Luz García Balcarce, analista de Ecolatina. En 2014, los préstamos avanzaron 20% mientras que los depósitos crecieron 29,5% anual.
Regulaciones y ganancias
Para los especialistas, el escenario quedó configurado en función de los intereses del Banco Central. Y es que con el objetivo de aumentar la demanda de pesos, la entidad que conduce Alejandro Vanoli decidió incrementar en varios puntos la tasa a la que retribuía sus pasivos. «Esto funcionó como un claro incentivo a los bancos para canalizar su liquidez hacia el sector público (por caso, la participación de Lebac dentro del activo de los bancos aumentó 9,5 p.p. hasta llegar a 27% del total), en vez de prestarlo al sector privado (-13% real)», señala el informe.
Estos menores créditos se conjugaron con una reducción de los depósitos de empresas y particulares (-6% real en 2014). Según señalan en Ecolatina, dicha contracción se explica por la caída del ingreso real de la población que minó su capacidad de ahorro. Por otro lado, tras la devaluación y el incremento de las tasas activas, tanto empresas como familias dejaron de tomar préstamos, aumentando la liquidez.
Dos factores influyeron en las ganancias de los bancos. Por un lado, en los últimos meses de 2013 los bancos incrementaron notablemente sus posiciones en moneda extranjera, las que se valorizaron significativamente tras la devaluación de enero del año pasado. A ello hay que sumarle que a lo largo de 2014 las entidades consiguieron sostener su rentabilidad gracias a las inversiones en títulos públicos, especialmente LEBAC, que permitió a las entidades cobrar intereses por $ 44.350 millones (más que duplicando el resultado del año anterior, de $ 20.600 millones).
«La economía se contrajo 2% en 2014 según las consultoras privadas y es lógico que el volumen de negocios de los bancos se haya achicado», sostuvo Ramiro Castiñeira, analista de Econométrica. «Con lo que los bancos no pudieron colocar en préstamos, decidieron ponerlo a tasa en el Banco Central. Hay que tener en cuenta que el fondeo para los bancos hoy ronda el 10% y que las tasas del BCRA le pagan 30%. Lo que vale es siempre el spread», agregó.