Los principales bonos argentinos sufrieron un fuerte castigo y en algunos casos se desplomaron hasta más de 7%, llevando al riesgo país a ubicarse cerca de los 2.500 puntos básicos. Ocurrió ante una renovada aversión por las tensiones regionales, sumado a la impaciencia de los inversores sobre la ausencia de definiciones del nuevo Gobierno electo de Alberto Fernández, en cuestiones políticas, económicas, y financieras.
Los principales bonos argentinos sufrieron un fuerte castigo este martes y en algunos casos se desplomaron hasta más de 7%, llevando al riesgo país a rozar los 2.500 puntos básicos, ante una creciente aversión por las tensiones regionales, sumado a la impaciencia de los inversores frente a la falta de definiciones del nuevo Gobierno electo de Alberto Fernández, en cuestiones políticas, económicas, y financieras.
“Son esos días en los que se conjugan varias noticias negativas, hay una creciente incertidumbre local, en un contexto regional adverso», describió Leonardo Chialva, socio director de Delphos Investment.
En primer lugar, hubo una masiva salida de capitales de Latinoamérica, dados los recientes sucesos desatados en Bolivia y Chile, principalmente.
El impacto se sintió con fuerza en los mercados trasandinos, donde el peso chileno se derrumbó a un mínimo histórico (tocó el techo psicológico de las 800 unidades por dólar), mientras que la bolsa de Santiago llegó a anotar un -8% intradiario, en medio de una ola de protestas y el anuncio de un cambio de Constitución. Manifestantes bloquearon vías y marcharon por las calles de Santiago y otras ciudades del país en una nueva jornada de protestas a la que se sumó una paralización de empleados públicos, estudiantes y otras organizaciones. En Brasil, el real bajó un 0,6%; mientras el Bovespa cayó un 1,5%. El peso mexicano se depreció un 1,2%, y el índice S&P/BMV IPC restó 1%.
«Hay demasiados condicionantes para entender al mercado. Las dudas políticas y económicas aumentan y eso se refleja en el riesgo país, que está en zona de ‘default’, mientras que en Sudamérica crece la inestabilidad en algunos Gobiernos y hay capitales externos que prefieren salir de la región», explicó un operador de la banca privada.
Con las severas caídas registradas en la jornada, sobre todo en los bonos con legislación de Nueva York, los inversores descuentan un canje de la deuda «cada vez más agresivo», con paridades que ya se ubican en torno a 38%, coinciden operadores.
«Los análisis sobre una América Latina complicada –y crispada- seguirán predominando, a la vez que la atención comenzará a estar sobre la visión del mundo –en particular, Estados Unidos- sobre la situación», dijo Nicolás Chiesa, analista de Portfolio Personal Inversiones.
Si bien «los hechos de Bolivia, Chile o Brasil a nivel político-institucional no creemos que tengan impacto directo sobre el mercado local, dentro de una coyuntura económica-financiera para el país que de por sí es compleja por razones propias. No obstante, si lo podría tener de forma indirecta, dada la posición de política exterior de Fernández», agregó.
En ese sentido, algunos analistas del mercado creen que este martes pesaron sobre los activos argentinos las declaraciones del presidente electo con relación a la postura de los EEUU frente al conflicto en Bolivia. Fernández señaló que el país gobernado por Donald Trump «volvió a las peores épocas de avalar golpes de Estado en América Latina».
“Los bonos reaccionaron muy negativamente a varias cosas. Una de ellas fueron los comentarios de Alberto Fernández sobre EEUU. Ni bien se conocieron, el mercado empezó bastante vendedor lo que terminó impactando en el riesgo país y en los seguros contra default», resaltó Gustavo Neffa, director de Research For Traders.
Frente a este contexto, el bono más golpeado fue el Discount en dólares bajo ley neoyorquina, que se hundió un 7,1%, mientras que el riesgo país de Argentina se disparó 3,3%, a niveles de principios de septiembre: subió 80 unidades hasta los 2.493 puntos básicos.
«Los títulos argentinos estuvieron ofrecidos durante toda la rueda. Hubo caídas generalizadas», comentó a Ámbito Nery Persichini, jefe de Estrategia de GMA Capital. «Sin definiciones concretas del nuevo equipo económico ni señales sobre el problema de la deuda, las paridades de los títulos se ubican en torno a 38% y descuentan un canje cada vez más agresivo en materia de plazos, quita, tasa de cupón y período de gracia», añadió.
Otras bajas importantes las anotaron las versiones en dólares del Bonar 2024 (-4,5%); del Bonar 2020 (-5%); y del Bonar 2037 (-4,2%).
“Aguantaron mejor increíblemente los bonos con legislación argentina, creo que se está cerrando el spread con los títulos de legislación neoyorquina», analizó Neffa.
Por su parte, Sergio Morales, presidente de CELAI vinculó la fuerte caída de los títulos argentinos a la ausencia de novedades con relación a los planes económicos del Gobierno electo y respecto de los nombres que conformarían la cartera económica. «Se aproxima el fin de mandato del presidente Macri y todavía no hay definiciones concretas de Alberto Fernández, ni del gabinete económico, o con relación a la deuda», indicó.
«Los inversores y los fondos de afuera se estaban entusiasmando con un reperfilamiento de la deuda amistoso, rápido, y sencillo, incluso esperaban un equipo de gobierno que se pusiera a trabajar el mismo 28 de octubre, pero la realidad es que todo se demora y se complica, ya no solo en el país, sino que también en la región», reforzó Chialva.
Por otro lado, los bonos en pesos no estuvieron ajenos a esta dinámica bajista, y a pesar del escaso volumen negociado, dejaron caídas de entre 2% y 4% tanto para el tramo CER como floater, comentaron desde el Grupo SBS.
S&P Merval
Más leve fue la caída de la bolsa porteña, atenuada por la suba del contado con liqui, a pesar de lo cual el S&P Merval anotó su tercera baja en fila.
El panel líder de BYMA cayó un 0,7% a 33.430 puntos, en una operatoria con marcadas oscilaciones de precios y tras un inicio alcista.
Las bajas más importantes fueron para BYMA (-5%); BBVA (-4,7%); y Transportadora de Gas del Norte (-4,5%). Por el contrario, los «verdes» fueron encabezados por Central Puerto (+7,3%) luego de reportar un buen balance; Transener (+2,8%); y Transportadora de Gas del Sur (+2,5%).
En el exterior, los ADRs reflejaron mayoría de números negativos, con bajas de hasta 5,1% en bancos. Una de las pocas excepciones fue Central Puerto, que trepó un 7%.
Fuente: https://www.ambito.com/los-bonos-se-hundieron-71-creciente-incertidumbre-local-y-regional-n5065199