El ministro de Economía detalló cuáles son los ítems que están mirando para empezar a reducir las restricciones cambiarias
En el marco del Congreso del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF), el ministro de Economía, Luis Caputo, abordó diversos temas cruciales para la economía argentina. Entre ellos, destacó los cuatro requisitos que considera fundamentales para poder levantar el cepo cambiario. Estas declaraciones se alinearon con las palabras del presidente Javier Milei en otras oportunidades, reflejando una visión compartida sobre la necesidad de implementar medidas específicas antes de eliminar las restricciones cambiarias.
Caputo, extitular del Banco Central de la República Argentina (BCRA) y ex Ministro de Finanzas, explicó que los cuatro requisitos son: el ancla fiscal, la normalización del flujo, la normalización del stock y la relación razonable entre reservas internacionales y pasivos remunerados. A continuación, se detallan estos puntos según las declaraciones del ministro y el contexto económico actual.
1. Ancla fiscal
El primer requisito mencionado por Caputo es el ancla fiscal, que se refiere a la necesidad de mantener un equilibrio fiscal sólido. Esto implica que el gobierno debe tener un control estricto sobre sus gastos e ingresos para evitar déficits fiscales que puedan desestabilizar la economía.
Caputo destacó la importancia de este punto al afirmar: “Siempre pensamos que se tenían que cumplir cuatro cosas, cuatro requisitos. Uno, por supuesto, el ancla fiscal”. Este control fiscal es esencial para generar confianza tanto a nivel interno como en los mercados internacionales. En sus discursos, Caputo ha subrayado que mantener el equilibrio fiscal desde el primer día ha sido una prioridad para el gobierno de Milei.
La estabilidad fiscal también contribuye a la reducción de la inflación, otro objetivo crucial del gobierno. Caputo mencionó que el equilibrio fiscal está desde el comienzo de la gestión y que esto ha permitido evitar mayores sobresaltos económicos. El ancla fiscal actúa como un pilar fundamental para cualquier otra política económica, asegurando que las finanzas del estado no se desvíen de sus objetivos.
2. Normalización del flujo
El segundo requisito es la normalización del flujo, que implica estabilizar y regularizar los movimientos financieros y económicos. Caputo explicó que este punto se refiere a la necesidad de asegurar que los flujos de capital, tanto internos como externos, se desarrollen de manera predecible y ordenada.
En relación a esto, Caputo afirmó: “Dos, teníamos que normalizar flujo.” La normalización del flujo es vital para garantizar que la economía pueda operar sin restricciones innecesarias y que los actores económicos tengan la confianza de que sus inversiones y operaciones no se verán afectadas por fluctuaciones abruptas o medidas repentinas del gobierno. El punto hace hincapié en la regulación de los pagos de importaciones y, también, de otros movimientos cambiarios como el pago de utilidades.
Caputo señaló que se ha avanzado significativamente en este aspecto, estimando que la normalización de los flujos ha alcanzado aproximadamente un 70% o 75%. Este progreso es crucial para poder levantar el cepo sin causar desestabilizaciones mayores. Según el ministro, la mejora en la normalización del flujo financiero ha sido notable en los últimos meses, lo que representa un avance hacia el levantamiento del cepo.
3. Normalización del stock
El tercer requisito es la normalización del stock, que se refiere a la necesidad de regularizar y estabilizar los activos y pasivos financieros del Banco Central. Caputo explicó que este punto es crucial para asegurar que la economía tenga un balance sólido y sostenible entre sus activos y pasivos.
“Normalizar stock” es esencial para evitar situaciones de deuda insostenible o deudas no pagadas que puedan afectar la credibilidad del país en los mercados internacionales. La normalización del stock también implica tener un control riguroso sobre las reservas del Banco Central y otros activos financieros.
Caputo mencionó que, al igual que con la normalización del flujo, se ha avanzado significativamente en la normalización del stock, aunque reconoció que todavía hay trabajo por hacer para alcanzar un nivel óptimo. Este progreso es importante para crear un entorno económico estable y predecible, necesario para levantar el cepo de manera segura.
4. Relación razonable entre reservas internacionales y pasivos remunerados
El cuarto y último requisito es mantener una relación razonable entre reservas internacionales y pasivos remunerados. Caputo explicó que esta medida es crucial para garantizar la estabilidad del sistema financiero y la capacidad del Banco Central para manejar sus obligaciones.
El ministro expresó: “Teníamos que tener una relación razonable entre reservas internacionales y pasivos remunerados, que se podrían resumir como sanear el balance del Banco Central.” Esta relación es vital para asegurar que el Banco Central tenga suficientes reservas para respaldar sus pasivos y evitar una crisis de confianza en la moneda nacional.
Caputo reconoció que este es el punto en el que más alejados están de donde deberían estar. Actualmente, se estima que la normalización en este aspecto ha alcanzado un 70% o 75%, pero todavía queda un largo camino por recorrer. Mantener una relación equilibrada entre reservas y pasivos es fundamental para poder levantar el cepo sin causar un colapso financiero.
Perspectivas económicas
Durante su participación en el Congreso del IAEF, Caputo también habló sobre otros aspectos de la política económica actual y las perspectivas futuras. Subrayó que levantar el cepo en este momento sería inapropiado y que es necesario seguir trabajando en los cuatro requisitos antes mencionados.
Caputo afirmó: “No nos vamos a poner fechas, lo vamos a hacer cuando no haya sobresaltos.” Esta declaración refleja la cautela del gobierno en cuanto a la eliminación de las restricciones cambiarias, destacando que se hará solo cuando se cumplan las condiciones necesarias para evitar desestabilizaciones.
El ministro también se refirió a las conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para un nuevo acuerdo que podría ayudar a alcanzar una relación razonable entre reservas y pasivos. Caputo explicó que si se lograra un nuevo programa de desembolso con el FMI, se podría mejorar significativamente esta relación, lo que facilitaría el levantamiento del cepo.
En cuanto a la recuperación económica, Caputo se mostró optimista, señalando que ve una recuperación en “V”. Esto implica una rápida recuperación después de una caída, con indicadores económicos que comienzan a mostrar signos de mejora. “Yo soy súper optimista. Veo una V. Ya hay indicios de recuperación claros,” afirmó.
Caputo destacó que sectores como las jubilaciones, las asignaciones y los salarios privados registrados están mostrando signos de recuperación. “De enero a hoy, el salario privado recuperó. Y en la medida que sigamos bajando la inflación, todo va a mejorar,” indicó. Este optimismo se basa en las medidas económicas que el gobierno ha implementado y en el compromiso de mantener el equilibrio fiscal.
El ministro también enfatizó la importancia de que el presidente Javier Milei sea economista, destacando que su conocimiento y convicción han sido fundamentales para llevar adelante las reformas necesarias. “Es clave que el Presidente sea economista,” afirmó Caputo. Esta afirmación subraya la confianza en la capacidad de Milei para manejar las complejidades económicas del país y tomar decisiones informadas.
Caputo también abordó la cuestión del tipo de cambio y negó que haya un atraso cambiario. Aseguró que no tiene sentido convalidar un error de pronóstico con una devaluación y que la competitividad debe lograrse a través de la reducción de impuestos, no mediante devaluaciones. “No tiene ningún sentido convalidar este error de pronóstico con una devaluación,” explicó.