Las estimaciones del mercado indican que el tipo de cambio seguirá atrasado durante el año próximo.
Esta semana, el dólar abrió con una baja de 4 centavos y quedó en $17,56 a nivel minorista. Para los economistas, el atraso cambiario llegó para quedarse. Las proyecciones que incluye el Banco Central en el Relevamiento de Estimaciones de Mercado (REM), apuestan a la divisa cotizando en $20,20 dentro de 12 meses. Con una inflación prevista en 16,6%, la devaluación le seguiría el ritmo a los precios y mantendría al 2018 en la senda del atraso cambiario.
Con una mirada más dura que la media de los analistas, la consultora Economía & Regiones anticipa que el dólar estará en $20,40 en diciembre de 2018. A la inflación promedio la estiman en 20,2% -bastante por encima del cálculo del REM- por lo que proyectan que, en términos reales, la cotización estará «casi al nivel de la convertibilidad», en $1,04 por dólar. Hoy esa paridad está en $1,08.
Para esta consultora, detrás del atraso cambiario está la dominancia fiscal: la correlación entre la política monetaria y necesidad de financiar al Tesoro. «Tanto el comportamiento del dólar como el cumplimiento de las metas de crecimiento e inflación dependerán de lo que se haga en la esfera fiscal. En este sentido, tendremos que estar atentos a lo que el Congreso haga durante estas semanas en las cuales se sancionaran todas leyes con impacto fiscal», señalan, con relación a las reformas previsional, tributaria y laboral. Y apuntan que este camino es garantía de apreciación cambiaria. «El dólar se seguirá abaratando durante el próximo año, acercándose progresivamente a su valor de la Convertibilidad».
Desde Econométrica, Mario Brodersohn remarca que el atraso cambiario obliga a estar atentos a varios temas. En especial, al estancamiento de las exportaciones, al aumento de las importaciones y al crecimiento de los viajes de los argentinos al exterior.
Con un flujo de divisas acotado por la falta de movilidad de las exportaciones y atado al aumento de la deuda externa, en Ecolatina resaltan que hoy la economía tiene pocas herramientas para compensar por otras vías, como el aumento de la productividad y la baja de costos vía mejoras en la infraestructura, el efecto del atraso cambiario sobre la producción. «Nuestro sector transable debe sobrevivir sin mejoras de productividad ni cambiaria», sentencian.
La debilidad del dólar tiene un impacto desigual sobre la economía. «Vemos falta de competitividad para ciertas industrias por el atraso cambiario. Nunca llegó la famosa lluvia de inversiones que se esperaba. Sigue sin haber estabilidad y tampoco hay reglas claras», indica DW Global Investments. «A pesar de que los niveles de deuda externa están lejos de ser alarmantes, el futuro no deja de preocuparnos. Todo sigue atado con alambres y la incertidumbre es enorme, en un país que sigue siendo populista aunque ahora de color amarillo», aseguran. Y cuentan que, cuando sus clientes les consultan si vale la pena invertir en Argentina, les aconsejan que lo hagan porque los activos rinden bien. «Pero siempre tomando recaudos», advierten.
Fuente: https://www.clarin.com/economia/economistas-anticipan-dolar-20-finales-2018_0_ry_u2UnZG.html
