La posibilidad de investigaciones de la UIF sobre las operaciones en divisas calmó a los inversores y moderó la suba de las cotizaciones
El Banco Central intervino como siempre en el mercado de los dólares financieros, pero se encontró con un escenario de reacomodamientos.
La calma no fue casual. Durante la jornada de ayer comenzó a circular un rumor, ya confirmado, que puso a resguardo a los inversores: la UIF (Unidad de Información Financiera) que investiga las operaciones sospechosas y el lavado de dinero, iba a ser más exigente en los controles de las operaciones en los distintos mercados del dólar aprovechando las diferencias de precios entre plazas intervenidas y las libres.
Por un día, una buena parte de los inversores fue cauto. En el mercado oficial, donde se hacen operaciones de dólares MEP contra bonos AL30D, que controla el Banco Central, hubo una intervención de USD 25 millones que hizo cerrar a esta divisa en $ 182,46 (+60 centavos). Fue el mercado más activo de todos.
En el GD30, la plaza donde hay libertad para operar, el BCRA no se asomó y el dólar MEP perdió $ 2 y cerró a $ 200,27. El contado con liquidación se mantuvo en $ 215 e hizo que el cable -la diferencia de precios con el MEP- subiera 6% que es el costo de colocar al dólar en una cuenta del exterior. Los bonos atados al precio del dólar oficial (dollar linked) tuvieron leves bajas inferiores a medio por ciento porque estaban sobrevaluados.
El “blue” o dólar libre, tocó de nuevo $ 200 pero cerró a $ 199,50 (+50 centavos) porque apenas llegó al nivel psicológico florecieron los vendedores de divisas.
En medio de este reacomodamiento de los dólares en la plaza mayorista, donde el dólar subió 4 centavos a $ 100,12, el Banco Central debió vender USD 110 millones para abastecer a los importadores. A pesar de todo, debido a la suba del oro y a la caída del dólar en el mundo, las reservas aumentaron USD 83 millones a 42.879 millones porque tuvo el ingreso de casi USD 300 millones por créditos del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo.
El nivel de intervención para ponerle techo a la suba del dólar hizo que este ingreso de divisas quedara opacado. Lo más grave es que sucedió en un día favorable para las reservas por la caída del dólar ante las seis principales monedas del mundo y por la suba del oro. Cuando se dan estos dos acontecimientos, se siente el impacto en la apreciación de las reservas.
Los bonos de la deuda argentina, interrumpieron la esperanzadora suba del día anterior y el riesgo país subió 15 unidades (+0.9%) a 1.731 puntos básicos.
La Bolsa soportó una toma de ganancias, debido a que mermaron las operaciones de contado con liquidación ante el temor de que la UIF extremara los controles. En la Bolsa, se negociaron $ 2.161 millones y el índice S&P Merval bajó 1,73%. Las mayores caídas fueron las de Ternium (-5,66%), Central Puerto (-3,08%) y Aluar (-3%).
Los ADR’s -certificados de tenencias de acciones que cotizan en las Bolsas de Nueva York- continúan con sus negocios en ascenso y están a punto de perforar los $ 5.000 millones porque son activos que se operan en pesos y sirven de cobertura contra una devaluación. Ayer operaron $ 4.944 millones. Predominaron las alzas, lo contrario de lo que sucedió en la Bolsa. Lo más destacado pasó por YPF (+5,1%), Mercado Libre (+3,6%) y BBVA (+2,8%).
Faltan tres ruedas hasta las elecciones y van a ser intensas. La única certeza es que las apuestas girarán en torno al dólar. Un dato curioso es que, si el Gobierno es derrotado, los mercados se calmarán y pueden rebotar los bonos de la deuda.