Con la mira puesta en los precios y costos, el productor empieza lentamente y con casi un mes de atraso a cerrar operaciones de contratos forwards de cara a la próxima campaña. Este presenta a la fecha una baja del 20% respecto del año pasado, los cuales se pactan a u$s 210 la tonelada a mayo de 2016.
Datos del Ministerio de Agricultura muestran que al 2 de septiembre, ya hay registrados 455.000 toneladas, contra los 570.000 de 2014. La fuerte caída en el valor de la oleaginosa es el gran factor determinante por el cual el sojero espera para encarar el ciclo siguiente. En el 2013 fue de 879.000 y anteriormente de 1.38 millones de toneladas.
Para los operadores consultados, el volumen en su mayoría representa un intercambio ya sea por insumos o semillas y muy poco o casi nada pensando en entregar el poroto a los valores actuales.
“Vender con este escenario, es perder plata. En pocas palabras hacer un contrato es un acto de defunción”, con éstas palabras el director de Agripac, Pablo Adreani, explica la situación actual de la producción sojera.
Hoy se sabe que los 210 dólares que ofrece el mercado no alcanzan. El último informe del analista de mercado Reynaldo Muñoz, señaló que en campo arrendado y con un rendimiento promedio de 28 quintales por hectárea da como resultado una pérdida de 176 dólares por hectárea. Si por el contrario se hace un contrato tomando un porcentaje de la siembra. Habría un saldo negativo de 74 dólares por tonelada.
Por eso el productor esperará hasta último momento demorando la siembra hasta noviembre o diciembre. Las elecciones presidenciales de octubre definirá la situación de la campaña. La idea de una devaluación o modificación de las retenciones, es seguida atentamente por el campo.
USDA
Pasado el mediodía se sabrá los números sobre la oferta y demanda mundial de granos que difundirá el Departamento de Agricultura de los EE.UU. (USDA por siglas en inglés). En el se podrá saber a ciencia cierta la posible cosecha del país del Norte. Por ahora es de 106.5 millones de toneladas. Pero los análisis privados adelantaron que habría una corrección hacia abajo de un millón de toneladas a partir de la menor estimación del rinde promedio, que se estima que será de 31,2 quintales por hectárea.
De ser así, el precio de la oleaginosa repuntará por unos días aunque también dependerá del stock que todavía tenga EE.UU. para afrontar sus compromisos externos.
Si por el contrario sólo se mantiene el volumen, habrá una caída de entre 10 a 15 dólares en Chicago. Hoy el contrato noviembre cotiza a u$s320 la tonelada. Eso sería una mala noticia para la Argentina.