Ante las proyecciones de un retroceso del 24% del área sembrada de trigo para la campaña 2015/2016, el campo pide medidas para paliar lo que se ría una caída inminente para el cereal. Entre mañana y la semana próxima, productores de Buenos Aires, La Pampa y Santa Fe, analizaran los pasos a seguir ante la falta de respuesta del Ejecutivo.
“Escenario complicado para el trigo”, de esta forma arranca el informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), donde adelanta que pese a las buenas condiciones agronómicas para el cultivo, “el aumento de costos deja los márgenes en el lado negativo de la balanza y pone a la siembra del cereal en jaque”.
Para la Bolsa, el dilema pasa por los valores de alquiler los cuales se guían por la soja. Que frente al buen rendimiento, sirve de argumento a los dueños para aumentar la tierra a arrendar.
Frente a una expectativa de que “finalmente, se ajusten a la baja, no alcanza para revertir la situación de márgenes escasos o negativos, aun con buenos rindes”, dijo la Bolsa, que adelanto además una caída del área de siembra en la región núcleo del 24 por ciento.
Los 14 quintales que se pactaron en la campaña pasada en la zona núcleo pasarían a rondar entre los 12 a 10 quintales por hectárea en la actualidad. “Esto es lo que se viene hablando para la próxima siembra de trigo. Hoy no se está cerrando ningún contrato con los valores del año pasado, por lo tanto o se disminuye un 20% o habrá más tierras sin alquilar”, adelantó el responsable de Agrosoluciones, Marcelo Ljubich; una empresa que administra campos en Córdoba.
“El arrendatario no quiere poner más plata y lamentablemente si continua esto, nadie va a sembrar trigo con éstos valores y ni pensar en la soja”, dijo el experto.
Lo mismo observó la BCR: “En época de decisiones las mismas aun no están tomadas para la mayoría de los productores. Envueltos en la gran incógnita del trigo de sembrar o no sembrar, analizan márgenes en posibles escenarios futuros. La mayoría de las negociaciones aun no consiguen plasmarse en un acuerdo”.
Con dicho panorama y ante la consulta de este diario, fuentes oficiales manifestaron que por ahora no hay ninguna medida en puerta para el cereal.
La falta de una respuesta urgente hace que los productores empiecen a inquietarse frente a la cercanía de la siembra.
Hoy por ejemplo habrá una asamblea en La Pampa y el jueves 21 en Casilda, Santa Fe. Y se esta definiendo otra en el sudoeste de la provincia de Buenos Aires. Este último concentra el 50% de la producción triguera a nivel nacional.
“Lo que se necesita es un sistema de financiamiento para insumos y una garantía comercial para las cooperativas”, sostuvo el presidente de la FAA, Omar Príncipe.
Según el federado hay muchos chacareros que todavía tienen trigo del año pasado sin vender. Por eso planteó también una “segmentación” que abarque a más productores por lo que propuso que el mismo llegue “hasta los 3.000 toneladas de producción”.
Se mantiene mayor cosecha
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires volvió a mantener en su informe agrícola semanal que la cosecha de soja llegaría a los 60 millones de toneladas.
Según los datos publicados, la actividad de trilla ahora se concentra en regiones periféricas. Al presente informe se estima que la recolección cubrió el 79,5 % del superficie apta en toda el área agrícola, permitiendo calcular un progreso intersemanal de 10,9 puntos porcentuales explicado por las buenas condiciones climáticas de los días previos.
En números absolutos, luego de recolectarse más de 15 millones de hectáreas el rinde medio nacional cayó a 34,3 quintales por hectárea y el volumen parcial acumulado ya supera las 52 millones de toneladas.
A nivel nacional, aún falta recolectar poco menos de 4 millones de hectáreas, ubicadas en su mayoría sobre en el NOA y NEA y gran parte de la región bonaerense.
Por su parte la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), estimó una cosecha de 59,6 millones de toneladas. En la zona central los rindes llegan a superar el nivel medio de 40 quintales por hectárea (qq/hh), considerando soja de primera y de segunda. Este empujón, dice la Bolsa, se refleja en el rinde nacional promedio, que ahora se estima en 30,7 qq/hh.
La buena recolección se debe al buen clima a partir de la ausencia de lluvias.