Un banco internacional redujo su proyección de inflación al 176% anual para este año. Hay dudas sobre la unificación cambiaria y expectativa de que sigan subiendo los bonos de la deuda
La semana pasada dejó varias definiciones en materia financiera y los análisis de especialistas mostraron que el mercado empieza a creer en la posibilidad de un rebote de la actividad económica. El dólar terminó equilibrado, aunque el canje, la diferencia entre el MEP y el contado con Liquidación (CCL), siguió en 6% un valor elevado que indica que aumentó el costo de colocar dinero en cuentas del exterior. La rueda comenzó muy compradora, pero se fue debilitando, aunque no significa una señal firme para hoy porque la presión devaluadora de los exportadores sigue intacta.
El Banco Central tuvo otra rueda compradora, pero cabe aclarar que 58% de los importadores no se está haciendo de las divisas que necesita para comprar en el exterior. El saldo fue de un Central comprador de USD 184 millones sobre un monto operado de USD 466 millones, una buena señal de que aumentó la retraída liquidación de los exportadores. Es el monto más elevado desde el 4 de marzo. Las empresas e importadores compraron USD 282 millones.
El trader Nicolás Cappella de Invertir en Bolsa observó que los bonos que ajustan por CER, tras la licitación, tuvieron “movimientos dispares sin una lógica fija. Oferta en el TZX25 y demanda en el T2X5, oferta en el TZXD7 y demanda en el TZX28 sin que veamos una oportunidad clara de arbitraje entre ellos”.
En la curva de los bonos atados al dólar (dollar linked) continuaron con alzas de más de 1% en los duales y 0,55% en el TV24. Esta semana cierran los futuros de fin de marzo y se esperan movimientos fuertes sobre los meses siguientes porque las apuestas a una mejora del tipo de cambio van en aumento.
De todas maneras, la estrella de la semana fueron los bonos soberanos en dólares que parecen incontenibles y amenazan seguir el rally esta semana. No hay motivos para que se frenen cuando tienen los próximos pagos asegurados. Tuvieron alzas de 1,5% promedio y el AL30D está en su nivel más alto con una paridad del 55,69% y lleva 18,5% de ganancia en dólares en el mes. El riesgo país bajó a su menor nivel desde principios de 2021 al ceder 28 unidades a 1.432 puntos básicos (1,9%). Los inversores creen que tienen un recorrido de hasta 60,5% de paridad y calculan que el riesgo país puede bajar a 800 puntos básicos.
Los bonos Bopreal, que emitió el Banco Central para pagar a importadores, cerraron la semana con alzas importantes. El Serie 1 estuvo muy demandado al igual que la serie 3. Sin embargo, la licitación de la semana pasada de la Serie 3 fue un fracaso porque su paridad con el contado con liquidación está muy alta.
Ante este panorama, las consultoras hicieron sus pronósticos sobre el futuro. No son pocos los que ven una “V” en sus gráficos de actividad económica. Esto significa una fuerte caída de la economía con un inmediato rebote de la misma proporción. Hablan de una reactivación cercana.
Pero omiten que la suba de las tarifas incide en la inflación y baja salarios, porque alimentan la suba de alquileres que es explosiva y detona los ingresos de la clase media. Los que firmaron contratos semestrales en diciembre con al nueva ley, se encuentran en los pagos de abril con aumentos de 75% en tres meses. No hay salario que haya aumentado en esa proporción.
Las prepagas, suba de patentes y seguros, cuota de colegios, forman un paquete de empobrecimiento para el sector más decisivo de la sociedad.
La consultora Equilibra señala que, al levantar los controles cambiarios lo antes posible, impulsar la economía en forma de “V”, y profundizar la desinflación extendiendo el crawling de 2%, el Central necesita contar con reservas suficientes para contener el atraso cambiario en un contexto de mayor demanda de divisas”.
Más adelante agrega que “lo que suceda en adelante con el cepo impactará sensiblemente en la cuenta financiera. Por un lado, cuentas más claras impulsarían el ingreso de inversiones extranjeras y una baja del riesgo país y contribuiría a que el país y más adelante las empresas pudieran financiarse volviendo gradualmente al mercado de capitales internacionales. La pregunta es cuan factible es el ingreso de USD 15.000 millones que permitan levantar el cepo”.
J.P. Morgan uno de los grandes bancos de Estados Unidos señala que “mantenemos nuestra previsión de crecimiento negativo en el primer semestre del año, recuperándose en segunda mitad en el supuesto de que el esfuerzo de estabilización resulte exitoso con un crecimiento de la economía a un ritmo de 4%. Este camino sería coherente con un PBI anual en -3,6%”.
EconViews, en su informe semanal, advierte que “tenemos algunas dudas sobre el futuro del esquema cambiario y monetario, pero somos más optimistas sobre la sostenibilidad de la deuda pública. Aunque no creemos que el Gobierno pueda obtener 2 puntos de superávit primario (estamos más para un balance primario), sí creemos que el riesgo país va a seguir bajando. En nuestro escenario base la deuda sigue subiendo y cierra con un riesgo país de alrededor de 800 puntos. Esto dejaría a la Argentina a la vera de tener acceso al mercado, lo que permitiría renovar la deuda del 2025 y desestresar al Banco Central”.
En cuanto a las reservas, EconViews indica que es claro que la evolución dependerá en parte de la trayectoria del tipo de cambio real. Pero “en nuestro escenario las reservas pasarían a positivas en mayo. De todas maneras, en un escenario en donde los depósitos en dólares crecen fuerte, las empresas se empiezan a animar a tomar préstamos en dólares, la cuenta finita de cuantas reservas netas hay empieza a ser menos importante que en las épocas (hace 4 meses) en que se complicaba pagar la importación de mercaderías básicas. Si quisiéramos hacer la cuenta, nuestra impresión es que si no se sigue apreciando el peso el Banco Central termina el año con unos 4,000 millones de reservas netas. En resumen, el mercado elige creer”.
“Nosotros también somos optimistas”.
Sobre las jubilaciones indica que “la reforma propuesta en la movilidad jubilatoria (indexar al IPC + 12.5% en abril) no implica grandes cambios en 2024. Pero si la economía se estabiliza y baja la inflación, en 2025 implica una reducción de 13% real respecto a la fórmula actual”.
La consultora de Fernando Marull, FMyA, señaló que “esta semana, el Central siguió recuperando reservas, a un ritmo un poco menor de USD 100 millones. Con el Agro sin liquidar a gran velocidad las reservas netas están en U$S 2500 millones negativas. Otra noticia es que al Inflación sigue desacelerando, principalmente al ver la Core (excluyendo tarifas), y todos los reflectores pasan por ver cuándo rebota la actividad. Nosotros seguimos con el supuesto de que en el segundo trimestre revota en “V” por la cosecha y por la recuperación del salario privado. En el año caería 3.8% promedio todo arrastre estadístico, ya que volvería a niveles en el que terminó 2023″.
Más adelante agrega que “este mes el riesgo de la calle puede ser aminorado por la mejora en ayudas sociales, principalmente la suba de AUH del 28% por fórmula (a $52 mil) + bono escolar (de $70 mil), y el aumento de la Tarjeta Alimentar del 37% (a $91 mil), y ya venían mejorando desde que asumió Milei. Asimismo, las paritarias privadas podrían seguir al 15% en marzo y ganarle a inflación, y entra la Movilidad Jubilatoria de marzo + bonos. Todavía es un mes difícil, con la recesión y el impacto de tarifas, pero puede estar más contenido el malhumor social”.
La consultora 1816 tiene dudas. “Con brecha tan baja, la pregunta que se hace el mercado es cuándo se animará el Gobierno a unificar (o qué espera para hacerlo). El principal argumento a favor de unificar ahora es que los agregados monetarios son muy bajos, de modo que no es claro quién demandaría Dólares (o, mejor dicho, quién ofrecería pesos) ante una liberación. Los argumentos en contra son principalmente dos: las reservas aún son negativas, y los mercados de deuda (CER largos rindiendo negativo, linked dollar en paridades mayores a 95%, corporativos Hard Dollar (dólar billete) ley local rindiendo como bonos del Tesoro), sugieren que si bien no hay un stock grande de agregados sí hay una demanda no genuina de otros activos locales (por ejemplo, por parte de importadores) que debería desaparecer si se libera todo ¿Qué señales envía el Gobierno? Tanto Milei como Caputo hablan de ‘apuntar a mitad de año’, pero en los hechos se muestran prudentes (ni siquiera eliminaron la restricción de $200 millones o la norma que impide comprar tipo de cambio con caución) y la semana pasada el BCRA recortó tasas, dando la pauta de que todavía quieren licuar stocks (y la respuesta del mercado de cambios fue tan buena que habilita a preguntarse: ¿Qué sucedería si, manteniendo el blend 80-20, continuaran bajando la tasa?”.
“Salvo financiamiento externo, pensamos que la unificación no será en el segundo trimestre”, concluyeron.
El HSBC reconoce que “la actividad económica cayó más de lo que esperábamos y cambiamos nuestro pronóstico de 2024 a -4% desde- 2%, previo”.
Sobre la consolidación fiscal, le entidad señala que fue “más significativa de lo que esperábamos a principios de año. El Gobierno registró superávits presupuestarios en enero y febrero, nosotros, un pequeño superávit primario para el año ya que sería difícil sostener en nuestra opinión”.
“El Banco Central -agrega- ha mantenido las tasas por debajo de la inflación y la economía va a través de un proceso de desmonetización revirtiendo el importante exceso creado en años pasados. Creemos que los tipos de interés se volverán positivos en términos reales en el segundo semestre de 2024. Estos factores permitirán una desinflación más rápida con un aumento de precios de 37% en enero-febrero frente a 48% que preveíamos. Recortamos nuestra inflación de 2024 hasta 176% frente a 210%”, agrega el análisis.
El HSBC indicó que “nuestro escenario base es que el Gobierno estabilice con éxito la economía y elimine los controles cambiarios a lo largo del segundo semestre del año, lo que resulta en la unificación del mercado de divisas a finales de año. Este escenario aún está sujeto a riesgos significativos. La popularidad de la administración, dadas las dificultades económicas, sigue siendo un factor clave a monitorear”.
De todos los pronósticos, se deduce que la coincidencia es el rebote de la economía de manera brusca en el segundo semestre, pero con algunas dudas sobre la unificación cambiaria. El dato llamativo es que el HSBC redujo la inflación del año de 210% a 176%.