Llega el ingreso extra de fin de año y lo más importante es no malgastarlo. Los especialistas sostienen que lo ideal es invertir una parte. Para el pequeño ahorrista, las Lebac y los fondos dedicados a ellas son los preferidos porque le ofrecen altos retornos y buena liquidez. Para los más arriesgados, hay oportunidades en acciones, títulos públicos e, incluso, criptomonedas
De acuerdo con la Ley, los empleadores tienen plazo hasta hoy para depositar el segundo Salario Anual Complementario, más conocido como aguinaldo. En muchos casos, este ingreso extra se destina a saldar deudas que se acumularon en los meses previos o se usa para afrontar los gastos propios de la época de fiestas. Sin embargo, aquellos que tengan resueltas esas cuestiones podrán invertir al menos una parte de su aguinaldo.
Lo importante, en cualquier caso, es evitar malgastar el dinero. «Para organizarse recomendamos utilizar la regla 70-30, en la que se destina 70% de los ingresos a los gastos básicos como alimentos, salud, transporte y educación. El restante 30% se divide en partes iguales entre el ahorro, el entretenimiento y el pago de deudas», sugirió Rodrigo Nadal, director de Resolvé Tu Deuda, la compañía que orienta a sus clientes para que logren cubrir sus obligaciones financieras con recursos propios.
Al momento de recibir el pago del aguinaldo, desde esa firma recomiendan tener en cuenta los gastos fijos (que aumentan en las fiestas), evaluar la posibilidad de saldar deudas, analizar si se necesitará ese dinero para afrontar gastos de vacaciones de verano y, finalmente, separar un excedente para invertir. «Una planificación anticipada en la que se evalúen las necesidades inmediatas y posibilidades de inversión más adecuadas nos ayuda a garantizar un uso adecuado del dinero que obtenemos por el aguinaldo», señaló Nadal.
En cuanto al destino específico del ingreso, Mariano Otálora, director de la Escuela Argentina de Finanzas Personales, opinó: «Ya que cobramos en pesos, yo recomiendo invertir una parte en dicha moneda y otra en dólares, en porcentajes que defina cada uno en función de su comodidad. En general, los aguinaldos son montos chicos y por eso son preferibles las inversiones flexibles, que permitan entrar y salir rápido».
La inversión del aguinaldo como cualquier otra depende mucho del perfil de riesgo de cada persona y, sobre todo, de cuánto tiempo esté dispuesto a prescindir de ese ahorro para destinarlo al sistema financiero. «Para quien nunca invirtió o recién empieza a hacerlo hay dos opciones fundamentales: las Lebac y los fondos comunes de inversión», indicó José Bano, gerente de asesores financieros de InvertirOnline.com. Y agregó: «Las Lebac deberían seguir siendo buen negocio por un tiempo más. Aun si empieza a bajar las tasas, todavía hay mucho margen, ya que actualmente la Lebac paga 29% contra una inflación esperada en tono al 17% para 2018».
Otálora se manifestó en sentido similar: «En pesos, una opción es aprovechar la próxima licitación de Lebac (este martes) o entrar en un fondo que a su vez invierta en esos instrumentos». El experto añadió otras dos alternativas en moneda local: «Por un lado, están los plazos fijos UVA, que están pagando una tasa de entre 2% y 4% puntos porcentuales además del ajuste por inflación. Por el otro, también están las finanzas colaborativas, que ofrecen rendimientos por encima de las Lebac». En ese último grupo, la plataforma online más conocida es Afluenta, que con una inversión mínima de $ 5000 ofrece rendimientos superiores al 43%.
Con respecto al porcentaje de la cartera destinada a inversiones en moneda extranjera, Otálora consideró: «En cuanto a dólares, aquellos que quieran comprar billetes pueden hacerlo en los próximos días porque está barato, aunque en enero y febrero debería ir aumentando un poquito más. Esos dólares pueden colocarlos en un fondo que invierta en Letes, para sacarles un buen rendimiento».
Para quienes tengan un perfil más arriesgado, el abanico de inversión se amplía y abarca desde títulos públicos hasta bitcoin. «Pensando en otras alternativas, hay bonos que podrían andar muy bien. Por ejemplo, el Boncer 2021, que ajusta por inflación. Hoy, la tasa está en CER+4,6%, es decir que protege muy bien el valor de compra y es de relativo corto plazo. También sigue habiendo muy buenas alternativas en acciones pero hay que tolerar una mayor volatilidad», sostuvo José Bano. Por su parte, Mariano Otálora sumó una opción todavía más incierta: «Se puede destinar un porcentaje no mayor al 20% del aguinaldo a otro tipo de instrumentos, como las criptomonedas».