Jefatura de Gabinete coordinará a AFIP, BCRA, Economía y otras dependencias. Buscan irregularidades en la declaración de importaciones y exportaciones
El Gobierno creó ayer una dependencia para controlar el comercio exterior, a la pesca de episodios de subfacturación y sobrefacturación de operaciones que impliquen salida de divisas.
La llamada Unidad de seguimiento y trazabilidad de las operaciones de comercio exterior, que encabezará el Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, está integrada por distintas dependencias, que cruzarán datos para detectar y sancionar operaciones tendientes a fugar divisas y se pondrá en funcionamiento esta mañana.
Según el decreto 2103, integrarán la Unidad el Ministerio de Economía (representado por la Secretaría de Comercio y la Subsecretaría de Competitividad), la AFIP (Dirección General de Aduanas, Dirección General Impositiva y Dirección general de Recursos de la Seguridad Social), el Banco Central (Superintendencia de Entidades Financieras), la CNV, la Superintendencia de Seguros, la Unidad de Información Financiera (UIF) y la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac).
La razón de ser de la nueva Unidad es vigilar a las empresas, sobre todo grandes, que sobrefacturan importaciones para pagar menos impuestos y girar más divisas al exterior, y que subfacturan exportaciones, para ingresar menos dólares, mostrar menos rentabilidad y evadir.
Así se explica en los considerandos: "La AFIP ha detectado diferentes casos de sobrefacturación de importaciones, y precios de transferencia que disminuyen el monto de impuestos a pagar en la República Argentina promoviendo al mismo tiempo sistemas encubiertos de transferencias de divisas afectando de este modo la calidad de vida del pueblo argentino mediante maniobras delictivas", se lee. El Gobierno atribuyó esta operatoria a las grandes firmas que concentran "aproximadamente el 68% del comercio exterior".
Los titulares de todas esas entidades se reunirán hoy con Capitanich en Casa de Gobierno para poner en marcha lo que, dijeron distintas fuentes oficiales consultadas, se trata de una coordinación de áreas que manejan distinta información y que, hasta hoy, procedían a fiscalizar y sancionar de forma independiente unas de otras.
Así, por ejemplo, si AFIP sospecha, al cotejar datos de Aduana, que una empresa subfactura exportaciones, presentará esa información al resto de los despachos oficiales, para cruzarla con la información de la Superintendencia de Entidades Financieras del Central o con los más de 100.000 Reportes de Operaciones Sospechosas (ROS) de la UIF.
La conformación de la Unidad de Trazabilidad se suma a las sanciones a una treintena de empresas que instrumentó AFIP en los últimos días, con Cargill como caso testigo, por inconsistencia fiscal. Y a las reuniones que promueve el Banco Central con los titulares de la UIF, la Procelac y otras entidades encargadas de controlar el cumplimiento de la normativa cambiaria, en el intento de reducir la operatoria de dólar blue y contado con liquidación. A estos encuentros se sumó ayer Ricardo Echegaray, el titular de la AFIP.
Para el gerente de la Cámara de Importadores, Miguel Ponce, "todo lo que ayude a que el comercio exterior transite por los caminos de la legalidad es bienvenido, pero no queremos que paguen justos por pecadores; el temor es que esto venga a disimular que los dólares necesarios para la operatoria no están". El ejecutivo hay importaciones realizadas e impagas por trabas del Central por entre u$s 5.200 y 5.500 millones, sin contar las operaciones de servicios, como turismo y pago de royalties y patentes.