El Presidente se comprometió a trabajar en la postergada reforma tributaria.
«Los impuestos nos están matando en la Argentina«. La frase, habitual en boca de dirigentes opositores y empresarios, fue pronunciada por el presidente Mauricio Macri durante una conferencia de prensa realizada este miércoles en la provincia de Córdoba.
El jefe de Estado admitió que a principios de año anunció una reforma tributaria integral y «se ha avanzado poco» en los últimos meses. «Tenemos que bajar los impuestos en general. Hay que ponerse las pilas para que bajen los aportes en la Argentina», aseguró el mandatario.
Macri afirmó que «se consolida una tendencia a la baja» en materia inflacionaria, tras la difusión de un índice de 1,2% en junio, y remarcó que al dólar, que experimentó una suba en las últimas semanas, «no hay que prestarle mucha atención» ya que remarcó que bajo su gobierno «fluctúa» sin restricciones.
«Por suerte estamos bajando la inflación, como habíamos prometido, con este 1,2%, que es el primer índice nacional, y eso marca que seguimos consolidando la tendencia a la baja, que es lo que queremos todos, porque la inflación siempre castiga a los que menos tienen», evaluó el mandatario.
Al respecto, Macri advirtió que «no se podía vivir con ese INDEC que decía que esto era Disney«, en una conferencia de prensa que brindó en compañía del gobernador cordobés Juan Schiaretti, el ministro de Transporte Guillermo Dietrich, y el diputado de Cambiemos Héctor Baldassi, quien nuevamente se postulará por ese espacio.
En relación a la suba del dólar, el Presidente sostuvo que «fluctúa libremente, a veces sube, y a veces baja, no hay por qué prestarle mucha atención», y que incluso la moneda norteamericana «viene acompañando» el proceso económico, y por tanto «es muy bueno para la Argentina».
Macri señaló que «ahora las empresas pueden venir y comprar y vender en dólares, porque no tienen el cepo, y si el día de mañana les va bien y quieren mandar un dividendo, lo pueden mandar; el que siente que si viene, se puede ir, va a querer venir».
Finalmente, auguró que «Argentina es el país que más va a crecer en los próximos 20 años, y ya estamos creciendo. Vamos a terminar este año creciendo en alrededor del 3% y el año que viene vamos a crecer más».
En relación, al cepo (restricción a la compra de dólares para ahorro, implementado por la gestión de Cristina Kirchner), criticó que «ese dólar era una mentira, porque no llegaba cualquiera, sino el que tenía un acomodo».
Por otro lado, se refirió a la situación de la procuradora general Alejandra Gils Carbó y consideró que «no es imparcial, sino una militante que ha omitido investigaciones de los hechos de corrupción del gobierno anterior y ha desatado con los fiscales una campaña que movió decenas de causas contra nuestro gobierno sin fundamentos«.
Por otro lado, el jefe de Estado insistió en que para las próximas elecciones legislativas el país define si continúa «con el cambio» o si se vuelve «hacia el pasado».
«Se define si continuamos con el cambio en el país o volvemos hacia el pasado. Hemos dado pasos importantes en estos 18 meses, vemos una Argentina que ha vuelto al mundo, en la cual nos decimos la verdad, donde se trabaja en equipo, donde ni Córdoba ni nadie está discriminado por cuestiones políticas», afirmó.