Los residentes y empresas tienen menos recursos para comprar divisas, pero los extranjeros se van de la Argentina y presionan sobre la paridad cambiaria y las tasas de interés. En 6 meses el tipo de cambio multilateral real bajó de 135,57 a 118,70 puntos, se atrasó 12,4 por ciento
La suba del 96% del tipo cambio desde el inicio de marzo de 2018 hasta febrero último provocó una disminución del 55% en el atesoramiento de divisas por parte del sector privado. Por el contrario, los «Inversores institucionales y otros», tanto residentes como no residentes, efectuaron compras netas por alrededor de USD 600 millones, mostrando una reversión respecto a las ventas netas observadas en febrero de 2018 por USD 1.100 millones, producto del efecto contagio de la salida de capitales de los mercados emergentes, que siempre en el caso de la Argentina sobresale por su intensidad.
De ahí que el bimonetarismo se mantiene con singular intensidad, pese a la devaluación del peso de casi el 50%, que es otra forma de decir que ahora por la suba promedio del tipo de cambio con los misma cantidad de pesos de un año atrás ahora se compra la mitad de la divisa.
Esa no parece haber sido la única causa de la menor demanda de moneda extranjera por los cada vez menos argentinos que pueden comprar divisas con ingresos que se deterioraron en términos en más de un 12%, sino también de las empresas que acusan disminuciones de las ventas de sus productos a ritmo de más de 10% en supermercados y shopping, y de hasta el 40% en bienes durables como automotores, motos y viviendas nuevas y usadas.
El fenómeno se observó con singular intensidad en la disminución de la compra neta por parte de personas humanas en 55% en un año, a USD 950 millones, respecto de USD 2.100 millones de febrero de 2018 que «puede explicarse por las menores compras para atesoramiento y para viajes al exterior», destaca el Banco Central en su Informe Mensual del Mercado de Cambios.
Según el relevamiento de la autoridad monetaria «la cantidad de individuos que vendieron billetes en el mercado de cambios volvió a mostrar un incremento con relación a enero, totalizando 660.000, y de 75% con respecto al conjunto de individuos de igual mes de 2018 (380.000 personas). Por su parte, la cantidad de personas que compraron billetes a través del mercado de cambios disminuyó en unos 350.000 clientes con respecto a enero de 2019, totalizando 920.000 personas».
Como es habitual, el BCRA resalta: «las operaciones con billetes de individuos se concentran en los estratos inferiores de monto: en febrero, el 69% de las ventas brutas y el 67% de las compras brutas fueron realizadas por montos inferiores a USD 10.000. Mientas que los vendedores tuvieron ventas per cápita de USD 1.025, y compras por un promedio USD 1.286 en el mes».
Aumento de las transacciones en la economía real
De todas formas, el movimiento de divisas volvió a poner de manifiesto que la denominada «formación de activos externos», por no decir directamente ahorro neto en divisas por parte del conjunto de residentes, representó en febrero menos del 2% del total operado en el mercado de cambios.
El informe oficial del movimiento total de divisas en el segundo mes de 2019 determinó que el monto total ascendió a USD 51.600 millones, un 21% más que el nivel registrado un año antes, aunque en el promedio diario el incremento se atenuó a 9%, por efecto de la mayor cantidad de días hábiles.
Por el contrario, el volumen negociado en los mercados a futuros descendió en febrero a USD 20.495 millones, equivalentes a unos USD 930 millones por día, 15% menos que en febrero del año anterior.
La profundización de la recesión en marzo en comparación con marzo de 2018, cuando la actividad tocó su punto máximo en los pasados 12 meses, habría provocado que continuara la disminución relativa de la formación de activos externos por parte de los residentes, pero por el contrario, el aumento del voltaje del clima electoral, y la aceleración de la inflación al rango del 4% por mes, disparó la salida de divisas por parte de inversores extranjeros, fenómeno que derivó en una nueva corrección del tipo de cambio a la zona de $43, como había testeado 6 meses antes.
Atraso cambiario tras el pico de septiembre último
Según las estadísticas de la autoridad monetaria, en septiembre el tipo de cambio multilateral, esto es la relación de los precios de las divisas de los principales socios comerciales de la Argentina, descontado el efecto de la inflación en cada caso, había ascendido a 135,57 puntos con base 100 el 17 de diciembre de 2015, cuando se levantó el cepo cambiario, -se había devaluado el peso un poco más del 26%-, y ahora cayó a 118,7,se apreció la moneda nacional en 12,4 por ciento.
De ahí que el mercado, a través de los bancos, exigen a la autoridad monetaria una tasa de interés cada vez más alta, para que pueda cumplir con su objetivo de emisión cero, porque de lo contrario considera más atractiva la demanda de dólares, habida cuenta que observa que para volver al nivel real de 6 meses antes la divisa debería escalar hasta $49, a valores de hoy, y de ahí acompañar el efecto de la inflación interna menos la del promedio de los socios comerciales.