El mercado de criptomonedas enfrenta un panorama incierto, afectado por caídas generalizadas, tensiones económicas globales y políticas comerciales erráticas, lo que plantea dudas sobre su recuperación a corto plazo
Las criptomonedas vuelven a anotar fuertes caídas al inicio de esta semana, con el Bitcoin (BTC) que pierde los u$s82.000, después de haber alcanzado los u$s88.000 el pasado viernes.
La mayoría de las altcoins también se ven afectadas, con el Ethereum (ETH) cayendo un 2%, poniendo en riesgo los 1.800 dólares. Otros tokens como XRP, Dogecoin (DOGE) y Cardano (ADA) registran descensos de hasta un 5%. Sin embargo, criptomonedas como Solana (SOL) logran desmarcarse de la tendencia bajista general del mercado.
Tal como menciona el último informe de Buenbit, Bitcoin sigue en un momento crítico y se consolida entre niveles de soporte y resistencia que podrían definir la dirección del mercado en los próximos días. Actualmente, vemos el soporte en us$86.190 lo que mantiene la estructura alcista, y sostiene la posibilidad de un movimiento impulsivo hacia los u$s91.000.
“Sin embargo, el activo aún no muestra suficiente fuerza para romper las resistencias en u$s87.500 y u$s88.580, puntos clave para validar la continuidad de la tendencia alcista. Si el BTC logra superar esta zona, se abrirá espacio para un avance más significativo, impulsado por la estructura técnica de una posible tercera onda de Elliot. No obstante, si el soporte en u$s86.190 se pierde, el mercado entrará en una zona de riesgo, y una caída por debajo de u$s83.200 invalidaría el intento de recuperación, lo que podría llevar a una corrección más pronunciada”, consigna el informe del broker.
Y agrega que, en el corto plazo, el sentimiento del mercado es de incertidumbre, mientras los inversores analizan de cerca la dinámica de las rupturas. “Desde Buenbit consideramos que la falta de un catalizador macroeconómico relevante podría ser el condimento de esta indecisión, mientras que el flujo institucional aún no muestra una entrada agresiva. Esto nos lleva a concluir que el escenario está abierto en ambas direcciones: por encima de u$s87.500, el sesgo alcista se fortalece, mientras que por debajo de u$s86.190, el riesgo de una retracción aumentaría con fuerza”, concluye.
¿Cómo vienen los ETFs?
A pesar de estas caídas, los fondos cotizados (ETFs) de Bitcoin al contado siguen atrayendo inversiones, con entradas netas de u$s196 millones de la semana pasada. En contraste, los ETFs de Ethereum experimentaron una pérdida neta de u$s8 millones.
Este comportamiento de los mercados se produjo tras una semana complicada en las bolsas estadounidenses, influenciada por datos económicos recientes y las tensiones comerciales impulsadas por la administración de Donald Trump. En particular, el índice de precios de consumo personal (PCE) se mantuvo estable en un 2,5% en enero, coincidiendo con las expectativas de los analistas, mientras que la tasa subyacente, que excluye alimentos y energía, aumentó a un 2,8%, una décima por encima de lo esperado. Este dato es clave para la Reserva Federal (Fed), lo que podría complicar la reducción de tipos de interés en el corto plazo.
Además, la Fed revisó al alza sus previsiones de inflación y ajustó a la baja sus estimaciones de crecimiento, lo que refleja las secuelas de las políticas comerciales agresivas del expresidente Trump. El modelo GDPNow de la Reserva Federal de Atlanta prevé una contracción económica del 2,8% para el primer trimestre, o un 0,5% ajustado por importaciones y exportaciones de oro, lo que alimenta los temores de una posible estanflación o recesión.
A su vez, los mercados continúan evaluando el impacto de las políticas arancelarias del presidente Trump, que recientemente anunció nuevas tarifas a Rusia si no se llega a un acuerdo de paz con Ucrania. Este entorno de incertidumbre económica y geopolítica está afectando negativamente a activos de riesgo como las criptomonedas, presionadas por el temor a una crisis económica en EE. UU.
«El sentimiento del mercado refleja esta dualidad, donde la fortaleza del empleo se ve empañada por la desconfianza en las políticas erráticas del gobierno. Esto ha impulsado una revalorización del oro y una fuga de capitales hacia mercados más seguros y activos que se consideran refugios», comenta Javier Molina, analista sénior de mercados de eToro.
En este escenario, expertos como Joel Kruger, analista de LMAX Group, son cautos respecto al futuro cercano del Bitcoin y otras criptomonedas. «Es difícil predecir si hemos tocado fondo en 2025», comenta. Sin embargo, destaca que hay factores positivos, como el entorno regulador más favorable en EE. UU. y la creciente entrada de instituciones financieras tradicionales al sector cripto. «Cualquier retroceso adicional debería encontrar un sólido soporte en los niveles de 70.000 a 75.000 dólares», concluye Kruger.