El mercado internacional siguió firme, liderado por la soja, siguiendo muy de cerca las pérdidas sudamericanas, y el reemplazo en la originación de esa zona a EEUU. De hecho, las exportaciones norteamericanas fueron muy elevadas esta semana. El maíz no tiene tantos fundamentos internacionales, pero no se puede quedar muy retrasado con la soja, especialmente en vísperas de que comience la siembra en el hemisferio norte. Sin embargo, venimos operando estos factores desde hace meses, con fondos muy comprados, deseosos de encontrar una excusa para tomar ganancias. La misma pueden ser las primeras proyecciones para EEUU que se publicarán el 24 y 25 de febrero. De hecho, la semana pasada el mercado se topó con una fuerte resistencia en los 1600 puntos de Chicago.
Localmente vemos un gran aprieto por maíz disponible y temprano, donde los compradores están necesitando mercadería, la cosecha se está deteriorando, y de hecho se adelantó por la falta de lluvias. Esto está generando una firmeza, que contrasta con la expectativa de mejor oferta de junio en adelante. Brasil llegará inicialmente con su cosecha de segunda y luego lo hará la de Argentina, para empalmar luego con la norteamericana.
El mercado de trigo sigue inestable, muy atado al riesgo de que un problema entre Rusia y Ucrania limite el comercio del cereal. Los compradores, que vienen con stocks bajos tras la mala campaña anterior, no quieren correr el riesgo y anticipan negocios.
Veamos algunos de estos temas con más detenimiento
