• OPORTUNIDAD PESE A MAYOR RIESGO.
• AMPLIA DIFERENCIA DE RENDIMIENTOS.
• IMPACTO EN PRECIO POR LA CAÍDA DE RESERVAS.
La escalada del dólar en el mercado informal y el aumento de la brecha cambiaria a más del 75% impactaron de lleno en el precio de los títulos públicos, especialmente de aquellos que vencen después de 2015. La fuerte caída de las paridades, por otra parte, vuelve a poner a los bonos como una alternativa de inversión, ante el fuerte aumento de los rendimientos.
En ese sentido, el Bonar X, que vence en 2017, es el que vuelve a aparecer como el más atractivo. Aún considerando la volatilidad que se espera para los próximos meses, el AA17D (es decir, el título que cotiza directamente en dólares) cayó hasta los u$s 85, lo que arroja un rendimiento de u$s 13,6%. Según la consultora Delphos Investment, "los títulos públicos vuelven a verse atractivos, acercándose a zona de compra". El informe continúa indicando que "la realidad argentina está lejos de justificar los rendimientos que se observaban en noviembre de 2013, por lo que era lógica una corrección. Sin embargo, entendemos que la primera parte del año será para operaciones de corto plazo en la deuda, dada la volatilidad que mostrará la política argentina". Similares comentarios también surgieron de bancos de inversión internacionales.
También los bancos de inversión internacionales empezaron a mirar con atención este título, que se despegó del rendimiento del Boden 2015, que vence apenas un año y medio antes. De hecho, el RO15 tuvo un mejor comportamiento en las últimas semanas y cayó levemente hasta los u$s 96,5, lo que representa un rendimiento de sólo un 10,7%. La brecha de rendimiento entre ambos títulos ya es de 300 puntos básicos, es decir 3 puntos anuales, lo que luce bastante exagerado. En las últimas semanas, la ANSES salió a vender bonos agresivamente para reducir el tipo de cambio implícito y tratar de frenar el aumento del "blue". Pero al mismo tiempo deprime las paridades de los bonos, acentuando la caída.
¿Por qué hay tanta diferencia entre la tasa que ofrece un bono que vence en 2015 y otro en 2017? El Boden 2015 vence en octubre del año que viene, justo antes de las elecciones presidenciales. La apuesta de los inversores es que el Gobierno seguirá pagando normalmente con reservas, sobre todo teniendo en cuenta que será el último "esfuerzo" en este sentido de la administración kirchnerista. El detalle es que se trata del pago más grande de deuda privada de los últimos diez años, ya que se acerca nada menos que a los u$s 6.000 millones. A los niveles actuales representa nada menos que un 20% de las reservas del Central. Y para ese momento podría ser una porción mucho mayor.
Por lo tanto, el panorama quedaría mucho más comprometido hacia el futuro. La incertidumbre típica de los períodos electorales, por lo tanto, impactaría en los títulos que vencen después de esa fecha, como sucede con el Bonar X. Ambos fueron emitidos bajo ley argentina, por lo que no están sometidos a los vaivenes de la justicia neoyorkina. Economistas como Miguel Bein y Miguel Kiguel también salieron en las últimas horas a recomendar bonos dolarizados, especialmente luego de la caída de las últimas semanas.
El Bonar X perdió más de cuatro dólares en el arranque del 2014. Había cerrado el año pasado a u$s 90 por cada lámina de u$s 100, y bajó hasta u$s 85,5. El rendimiento de este título, que se acerca a 13,5% anual en dólares, ya se asimila a lo que rinden bonos venezolanos y de PDVSA para el mismo plazo.
Para los inversores, hay dos aspectos para monitorear en relación a la evolución de los títulos públicos. El primero tiene que ver con la volatilidad que se espera en los próximos meses, en el marco de la situación preelectoral y en el medio del aumento de la tensión cambiaria. Pero también se observa con preocupación el nivel de las reservas, ya que una caída más pronunciada empieza a poner en peligro la posibilidad de seguir pagando los vencimientos futuros con "cash".
Fuente: http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=725090