Sin ponerse de acuerdo en una estrategia en común, exportadoras barajan al menos tres alternativas distintas para llegar a los u$s 6.000 millones que pretende el Gobierno
Con el objetivo de que ingresen dólares en el último trimestre del año, el Gobierno se volverá a reunir la semana próxima con las principales exportadoras de granos para lograr que aporten u$s 6.0000 millones a la economía argentina. Dentro de las cerealeras, las opiniones están divididas y es por eso que no se llegó a un acuerdo general en la cámara que las reúne y las negociaciones entre el Gobierno y las empresas pasaron a ser bilaterales. Según pudo saber este diario se estarían evaluando por lo menos tres alternativas para dinamizar la liquidación de exportaciones.
De acuerdo a las estimaciones de las empresas, hasta fin de año se podrían liquidar u$s 4.200 millones. Sin embargo, en el Gobierno insisten en que la cifra llegue a u$s 6.000 millones y le solicitaron a los agroexportadores nucleados en Ciara-CEC u$s 1.500 / u$s 1800 millones adicionales. Debido a que la reunión del martes entre la cámara y el Gobierno terminó sin resultados concretos porque cada empresa mantiene una posición diferente, los funcionarios decidieron convocar a cada exportadora por separado para avanzar en un cronograma de ritmo y montos de liquidación de divisas hasta diciembre.
El problema principal para las exportadoras es que “no hay soja para comprar” porque el productor hoy decide no vender ante la perspectiva de una devaluación, a lo que se suman los bajos precios internacionales. En este contexto, los u$s1.500 millones adicionales deberían venir de las cerealeras mediante el mecanismo de prefinanciación de exportaciones.
Para lograr este objetivo, las cerealeras manejan al menos tres alternativas que ya le acercaron al Gobierno o tienen previsto poner en la mesa de negociaciones en los próximos días. .
A pesar que los funcionarios le aseguraron que no habrá devaluación, las perspectivas del mercado son otras. Es por eso que las empresas barajan diferentes opciones para cubrirse.
La primera es una Letra del Tesoro dollar linked. Esta posibilidad que ya estuvo dando vueltas en las reuniones entre el Gobierno y las exportadoras no fue bien recibida por el conjunto de las empresas porque consideran que será muy difícil conseguir financiamiento en el exterior sólo con el respaldo de un título del Gobierno. “Muchas empresas tendrían problemas con la casa matriz o el banco que otorga pre financiamiento”, apuntó un operador.
Descartada esta opción, las cerealeras verían con buenos ojos la liquidación de divisas si el Gobierno se compromete a subir la tasa de interés, tal como ocurrió tras la devaluación de enero. En este escenario, con los contratos de dólares a futuro cada vez más bajos, las exportadoras tendrían un incentivo para liquidar.
Por último, como tercera vía, una opción que empezó a circular es la de pedirle al Gobierno que extienda el plazo de liquidación de 30 a 180 días. De esa manera, las cerealeras se comprometerían a depositar los dólares en el corresponsal por lo que pasarían a computarse como reservas pero “la portadora podría seguir contando con los dólares hasta que venza la liquidación y cubrirse de una eventual devaluación”. Esta opción sería la que cuenta con mayores adhesiones dentro de las exportadoras aunque en el sector admiten que no todas estarían dispuestas a colaborar porque las posturas y situaciones que atraviesan son muy diferentes.
“La lógica es muy buena si hay desconfianza”, apuntó un experimentado trader del mercado.