Cuando parecía que el “Rusiagate” en EEUU o la enésima crisis política en Brasil serían esta vez la excusa perfecta para que el mercado local activara una necesaria corrección tras los innumerables récords históricos alcanzados entre abril y mayo, el apetito inversor por las acciones locales echó por tierra esa tesis, avalado en gran medida por la expectativa de la inminente recategorización de la plaza de fronteriza a emergente, que se anunciaría el tercer martes de junio. Este driver fue potenciado en la última semana por el furor que desperdigó en el recinto la salida a la Bolsa de BYMA, la nueva entidad que nuclea a todos los mercados bursátiles del país.
Pese una postergada reactivación de la economía, el Merval ya acumula en lo que va del año un impresionante ascenso del 31% (inclusive en moneda dura): en enero ganó 12,7%; febrero un 0,3%; en marzo un 6%; en abril un 3,7%; y en lo que va de mayo registra un 5,3%.
Con este escenario a cuestas, entre los inversores emergen varios interrogantes: ¿cuál será el momento preciso en el que las acciones locales sufrirán la toma de ganancias más anunciada de los últimos tiempos? ¿Se dilatará aún más? ¿El mercado ya descontó el regreso a la liga de emergentes, o todavía no dedujo del todo la noticia?
Por ahora, con perspectivas que permanecen positivas sobre todo en el mediano plazo, la única certeza que prima en el mercado de renta variable es la selectividad –cada vez más fina por cierto- ante la percepción de que gran parte de las principales acciones líderes –no todas- resultan “caras” para entrar o ampliar posiciones.
Sin embargo, siempre quedan algunas “perlitas” más atrasadas –respecto a otros papeles del mismo sector-, con potencial de un mayor recorrido alcista para los próximos meses, a diferencia de varias acciones líderes que, si bien se resisten a ajustar sus precios, muestran evidentes signos de agotamiento, según la opinión de algunos analistas.
Para Nery Persichini, economista jefe de MB Inversiones, “el mercado sigue comprando la ‘historia’ de la Argentina que, desde la frontera, empezó a hacer los deberes en materia económica e institucional para ingresar al grupo de emergentes”.
Ante un crecimiento que se demora, Persichini sugiere posar la mirada “en empresas que de por sí son rentables y generan caja casi automáticamente”. Por supuesto, “si la recuperación se consolida, sus negocios mejorarán”, argumenta.
En este sentido, destaca acciones como Autopistas del Sol (AUSO), y Transportadora de Gas del Sur (TGSU2), del panel líder, y a Boldt (BOLT) del panel general. Sobre TGSU2, acota que fue muy beneficiada por la revisión tarifaria de gas. Dentro del sector de real estate, cataloga a Consultatio (CTIO) como una “apuesta sólida”. “Esta empresa acaba de presentar excelentes resultados en el primer trimestre gracias a las ventas de más de la mitad de su proyecto Oceana Bal Harbour en Miami”, sostiene. Y recuerda que al grupo que conduce Eduardo Costantini todavía le resta vender “unos u$s 2.900 millones si consideramos todos sus emprendimientos”. La cifra equivale a tres veces la actual capitalización bursátil. “Además de buena rentabilidad y valuación atractiva, la empresa cuenta con una robusta posición de caja, bajísimo endeudamiento y trayectoria y management reconocidos”, refuerza el economista jefe de MB Inversiones.
Dentro del sector energético, otra empresa que expertos ven con recorrido alcista es Central Puerto (CEPU), la principal generadora de energía del país controlada por Sadesa, donde participa Nicolás Caputo. Durante mayo, “CEPU ha recibido un importante aumento en los precios de generación de energía y en el segundo semestre del año entra en servicio la nueva central Vuelta de Obligado, sumado a esto las mejores condiciones climáticas en la represa hidroeléctrica Piedra del Águila”, analiza Rafael Di Giorno, director de Proficio Investment. En consecuencia, el incremento de precios y de su producción, auguran una buena segunda parte de año. De todos modos, advierte Di Giorno antes de su eventual escalada alcista, “primero tienen que terminar de vender varios papeles de esta especie sus dueños o algún pez gordo”.
Además de CEPU, el director de Proficio resalta la empresa que fundaron en la década del ‘80 el presidente, Mauricio Macri, y su amigo incondicional, Nicky Caputo: Mirgor (MIRG), que actualmente se dedica al negocio de las autopartes electrónicas, la telefonía móvil y los productos electrónicos para el hogar. “La salida de despachos desde Tierra del Fuego es nuevamente intensa, y con el exitoso lanzamiento del Samsung S8, más algunas señales de aumento del consumo puede esperarse un buen balance trimestral”, estima Di Giono, que tampoco dejaría de colocar “unas fichitas” a las flamantes acciones de Bolsas y Mercados Argentinos (BYMA)”: “Son una clara apuesta al crecimiento del mercado”.
Más escéptica es la mirada del analista financiero Christian Buteler, quien observa “muy caro al mercado en este momento como para recomendar alguna acción en particular”. Explica que “la bolsa argentina es uno de los mercados que más sube a nivel mundial medido en dólares en lo que va del año”. Y resalta que “claramente el contexto económico del país no acompaña los rendimientos que estamos viendo en las acciones”. Inflación alta, dólar atrasado, economía que no termina de arrancar son algunos de los problemas que el mercado parece no prestar atención”, alerta.
De todos modos, recuerda que “no es el primer año que esto ocurre, Argentina viene subiendo desde hace mucho tiempo simplemente por expectativas”. Pero advierte que “las expectativas no se concretan y eso en algún momento pesará en los inversores”.
Es por esto que Buteler anticipa que “estamos cerca de una toma de ganancias importante que no se da desde hace varios años y más allá de poder rescatar algún que otro papel que pueda estar atrasado, cuando la toma de ganancias llegue afectará a todos los activos”. “Si entrás hoy a la bolsa creo que hay más para perder que para ganar”, concluye, sin embargo avisa que una vez que pase el período de corrección pondría el foco en acciones del sector del consumo, en particular los papeles de Molinos Río de la Plata (MOLI). Y en el sector energético, coincide con Persichini, sobre las buenas perspectivas de TGSU2, una gasífera con “con buenos fundamentos”.
Por último, el experto en renta variable de Puente, Juan Manuel Vásquez, apunta a una de las acciones rezagadas del sector financiero: Banco Francés (FRAN). Vázquez remarca que este papel podría tener un recorrido alcista debido a que en lo que va del año sufre un magro desempeño respecto a otras entidades líderes, como el Grupo Financiero Galicia (GGAL) y Banco Macro (BMA). En 2017, FRAN sólo gana un 9,7%, mientras que GGAL trepa un 67,7% y BMA sube un 39,2%. “El sistema financiero local es muy chico comparado con la región y debería crecer en la medida que Argentina corrija desajustes macroeconómicos”, pronostica el Head of Equity Research de Puente, y anticipa que en ese escenario “los bancos pasarían de un negocio transaccional a uno tradicional, compitiendo por volumen de préstamos y eficiencia”.