Brokers y asesores de inversión señalan que para que los instrumentos rindan en niveles similares a los que tenían cuando empezaron a cotizar es necesario que el BCRA acumule dólares.
Luego de haber llegado a 1650 puntos el 10 de marzo, el riesgo país comenzó a bajar en las últimas semanas, aunque está entre los más altos del mundo: 1521 puntos, cifra consistente con bonos del tramo corto de la curva rindiendo entre 19 y 20 por ciento. Analistas señalan que uno de los principales drivers para que esas tasas de retorno bajen es empezar a acumular dólares.
«Lo que están mirando los inversores es si el mercado de cambios genera el flujo necesario para poder repagar la deuda», señaló Juan Manuel Pazos, economista jefe de TPCG Valores. «La soja nos salvó, pero el BCRA compra mucho más de lo que acumula en reservas», añadió Pazos.
En el año el Central compró u$s 2079 millones, pero sus reservas brutas solo aumentaron u$s 339 millones (llegan a u$s 39.726 millones) y las netas bajaron: según Ecolatina arrancaron en u$s 5000 millones y hoy están cerca de u$s 4500 millones.
Una explicación tiene que ver con que el BCRA, para bajar la brecha, vende bonos en pesos y los recompra con dólares. «Es un perro que se muerde la cola: pusieron un cepo para no perder reservas, el cepo genera brecha; la brecha complica el mercado de cambios, la economía y la inflación; y usan reservas para cerrar la brecha», graficó Pazos.
Según un informe de Delphos Investment las compras en el mercado cambiario continúan a un muy buen ritmo durante marzo, pero se traducen en una menor acumulación de reservas por los pagos a organismos internacionales, movimientos de encajes bancarios y venta de dólares contra títulos públicos. «Según datos del balance cambiario, las ventas de dólares a cambio de títulos públicos alcanzaron u$s603 millones entre octubre de 2020 y enero de 2021», agregaron desde Delphos.
En un webinar organizado por PPI se le consultó a una serie de analistas qué debe hacer Argentina para volver a rendir cerca de 13%, como pasó tras la reestructuración. Federico Pérez, gerente de inversiones en Mariva Asset Management, contestó: «Un catalizador constructivo sería que el Gobierno salga del cortoplacismo de decir ‘bajo la brecha vendiendo bonos contra pesos y recomprando en dólares’ y empiece a mirar más allá de un mes, que compre reservas y entable alguna estructura de acuerdo con el FMI. Esas cosas espera el mercado».
Y Gabriel González Beramendi, CEO de Toronto Trust, sostuvo: «Si el Gobierno mostrase mejoras consistentes en lo fiscal gatillaría una suba importante en bonos».
Beramendi añadió: «Nadie espera que Argentina atraiga inversiones fuertes estos años, pero si el BCRA logra acumular reservas, la combinación de altos precios de los commodities con cierta disciplina fiscal, aún sin un plan económico ambicioso, sería suficiente para que los bonos suban».
En tanto, Pazos aclaró: «Hay que apuntar a una TIR de 10% como para un cambio material en la perspectiva de Argentina».
Por su parte, Gabriel Torres, vice president Senior Credit Officer de Moody’s Investors Service, señaló: «El mercado está diciendo que no cree que la Argentina pague a tiempo. Para pagar va a tener que lograr acceso a los mercados». Añadió que «la mejor señal sería acordar con el FMI».
Jorge Viñas, head portfolio manager de AdCap Asset Management, cree que para lograr rendimientos «normales» se necesita «un plan sostenible» y no solo «acumular de reservas restringiendo importaciones y pagos de deuda privada».