Bancos tienen la orden de no entregar más de $ 50.000 en efectivo a las mutuales y cooperativas. Algunas de ellas están ligadas con mesas que compran dólares informales
Mientras muchos esperaban un alza en el precio del dólar blue, luego del feriado cambiario de facto que impuso el Banco Central a los importadores, el billete cayó cinco centavos a $ 13,25.
La razón hay que buscarla en las inspecciones a las casas de cambio que realiza el BCRA, que terminó quitándole la licencia a París Cambio por vender dólares en forma ilegal.
Otro de los motivos fue una orden no escrita que bajó a varios bancos: no entregar más de $ 50.000 en efectivo a las cooperativas y mutuales. A partir de ahí todo debe hacerse por transferencia, de modo de impedir que esos pesos vayan a nutrir el mercado del dólar informal. De hecho, los pocos bancos que operan con cooperativas las están echando, al ponerle máximas exigencias y controles.
«No hay nadie en la cancha, hay muy pocas manos operando y no hay pesos, porque se cortó el efectivo que provenía del cambio de cheques con las cooperativas y mutuales. También se cortó el liqui, que es el hermano mayor del blue. Otra de las causas de la baja fue el rulo con el puré: los que compraron dólar ahorro para revenderlo en el informal», revela un correta, que tiene un teléfono rojo encriptado para no ser detectado.
«El billete bajó por el miedo, por los allanamientos y por la falta de efectivo que hay. A los bancos se les dijo que no le entreguen efectivo a las cooperativas (que con esos pesos abastecen a las cuevas). Además, apretaron a los supermercados para que el efectivo no lo cambien más por cheques en cooperativas, sino que los depositen en sus propias cuentas», revelan los conocedores del sistema.
La baja obedece a que, por temor a los controles, quedaron muy pocas manos en la cancha, que se abastecen de pesos a través de las cuatro o cinco cooperativas y mutuales líderes que quedaron en el mercado, que a su vez se venían nutriendo de pesos al comprarle el efectivo negro a tres o cuatro cadenas comerciales líderes», informa un conocedor del black market porteño. Incluso, según describen las fuentes, la operatoria se llevaba a cabo con contrato y todo, ya que entregaban entre $ 5 y
$ 10 millones por día.
De esta forma, las cadenas comerciales se ahorraban el 1,2% del impuesto al cheque, ya que no depositaban el efectivo en el banco, sino que lo cambiaban por distintos cheques, que le servían para pagarle a los proveedores. Además, se ganaban una tasa del 0,5%.
«Por los controles de la UIF y del BCRA se asustaron y llegó la orden de cerrarle el grifo a las cooperativas», detalla un correta, como se conoce en la jerga a los mayoristas «del bille».
«Acá faltan negocios: la gente que viene no es por negocios, o para cambiar el auto, o para armar algún emprendimiento, sino para tapar agujeros y pagar deudas, entonces lo que necesitan son pesos. Clientes nuevos ni se acercan», se queja.
El futuro del blue
¿Qué puede llegar a pasar con la cotización del billete? «Con un dólar Bolsa a $ 12,60, el blue no puede estar a $ 13,25. Está muy barato, como si estuviera subsidiado por los controles», cuentan en la plaza.
Todo dependerá de lo que suceda en los próximos días con las autorizaciones para importar del BCRA: «Que el gobierno mejor no promocione el nuevo plan de electrodomésticos porque las empresas del rubro no tienen los insumos, que son importados. Parece que el BCRA bajará el mínimo a informar para las importaciones, hoy de u$s 150.000, porque se dieron cuenta que las empresas le encontraron la vuelta. Hay una automotriz, por ejemplo, que importa todos los días por u$s 149.000 en muchos bancos a la vez», informan en la City.