Los u$s 5.700 millones que ingresarían superan en un 42% lo que entró en el último trimestre del año pasado, a pesar de que la tonelada de soja valía u$s 250 más en ese entonces. Y quebrarían el récord del cuarto trimestre del 2010. Analistas creen que el impacto de esta liquidación acelerada se va a hacer sentir en reservas, sumando hasta u$s 1.000 millones más a las estimaciones actuales de u$s 24.500 millones
Los u$s 5.700 millones en concepto de liquidaciones de exportaciones durante el último trimestre del año que tras un acuerdo con el Gobierno ingresará la Cámara de la Industria Aceitera-Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC) superan en al menos u$s 1.200 millones los ingresos que se estimaban para el período y en un 42% lo que ingresó en el último trimestre del año pasado, a pesar de una caída interanual en el precio de la tonelada de soja de cerca de u$s 250. La inyección de divisas permite a analistas revisar sus proyecciones de reservas para fin de año en cerca de u$s 1.000 millones.
El monto que según un comunicado del Ministerio de Economía "comprometieron" y según la cámara "estimaron" los grandes exportadores llevará al total de liquidaciones de exportaciones de las cerealeras que conforman Ciara-CEC para este año muy cerca de los u$s 25.000 millones récord alcanzados en el año 2011. La cifra opaca incluso al mejor cuarto trimestre del que lleve registro la propia cámara, el de 2010 con sus precios récord para la soja, cuando entraron u$s 5.200 millones en sólo tres meses.
Semejante cifra, de concretarse, no alcanza para alterar los análisis estructurales de los economistas pero, como mínimo, cambiaría la ecuación de corto plazo del Gobierno en cuanto a su capacidad de mantener estable el tipo de cambio oficial y a raya a los tipos de cambio paralelos al menos hasta fin de año.
En lo que va del año, las compras que hace el BCRA en el mercado cambiario para sostener el nivel de sus reservas equivalen a u$s 1 de cada u$s 4 que liquidó el agro. Hasta el 10 de octubre pasado, ingresaron u$s 19.225 millones y el BCRA compró u$s 4.777 millones. Esas compras permiten prever que el acuerdo entre el Gobierno y cerealeras tendrá un impacto en reservas, que ayer alcanzaron los u$s 27.345 millones y pierden más de u$s 3.200 millones en el año.
"Nosotros estimábamos que entre octubre y diciembre ingresarían entre u$s 4.000 millones y u$s 4.500 millones, con lo cual –nos falta hacer cifras– creo que a grandes rasgos vamos a subir unos u$s 1.000 millones las estimaciones de reservas para fin de año", dijo Pedro Rabasa de Empiria Consultores. "Asumo que parte de esa plata va a ir a más importaciones, para apuntalar un poco la actividad económica, pero la asfixia ya es tal que aún sin esta inyección de dinero descontábamos que se permitirían más compras", agregó Rabasa.
El Economista Fausto Sportorno, de OJF, se detuvo sobre lo difícil que será llegar a esa cifra para cerealeras, dada la caída en el precio del principal producto de exportación, la soja y sus derivados. "El volumen vendido o adelantado de ventas futuras va a tener que ser muy importante para alcanzar esa cifra. Pero asumamos que se alcanza: es una decisión del Gobierno moverlo a reservas o a importaciones para apuntalar a a una economía que cae", dijo Spotorno. Con todo, sus estimaciones de reservas para fin de año se verían afectadas a la suba, aunque no está en condiciones de calcularlo.
"Estas divisas compran un poco más de tiempo para mantener el tipo de cambio este que tenés hoy y llegar a enero con algo más de calma", dijo.
"Es un shock de confianza importante conseguir u$s 5.000 millones para este año", coincidió Belisario Álvarez de Toledo, de J&B Analytics. "Pero no te libera de la incógnita de lo que va a pasar en enero con los holdouts, que es el factor determinante", concluyó.