Inversores compraron bonos en default para beneficiarse del juicio que ganaron los buitres. Pero la baja oferta que dio Kicillof les mostró que el arreglo no está cerca
Pese a la demanda todavía existente, los bonos que quedaron en default en 2001 pasaron de ser los títulos de deuda de mejor desempeño entre los emitidos por Argentina, tras la sentencia favorable a los fondos buitre, a empezar a flaquear en sus precios, tras las palabras del Gobierno que indican que no ofrecerá un pago a los holdouts superior a los canjes.
Los bonos untendered han caído cerca de 5 centavos por dólar este año desde su máximo de 132 centavos por dólar luego de que el ministro de Economía, Axel Kicillof, dijera que Argentina no va a ofrecer a los holdouts mejores condiciones de lo que dio a los inversores en las reestructuraciones de deuda anteriores.
"Nos sacamos un enorme peso de encima", dijo Kicillof al portal El Destape. "Pero no resuelve la mayoría de los problemas que tuvimos el año pasado", agregó.
Tras la sentencia favorable a los holdouts y bajo la idea de que las negociaciones estaban activas, un grupo de inversores estuvo comprando bonos en default, ya que podrían beneficiarse del trato que ofreciera el país a los fondos buitre.
Tras la caída de la RUFO y ante las perspectivas de que las negociaciones son poco probables, los precios se inclinan hacia abajo. Posiblemente debido a la venta de tenedores que esperaban hacer un negocio a un plazo más corto.
Los bonos en default en dólares ahora cotizan a alrededor de 127 centavos por dólar, más de seis veces el precio que cotizaba en octubre de 2012, cuando Elliott ganó una orden de devolución en un tribunal de apelaciones estadounidense.
En ese lapso, la deuda emitida en los canjes de 2005 y 2010 ha rendido 25% en promedio.
Los fondos buitre rechazaron la reestructuración que ofreció el gobierno y demandaron con éxito al país obteniendo tres veces el capital. Argentina se negó a cumplir con la sentencia, diciendo que la cláusula RUFO prohibía extender mejores condiciones a los acreedores que rechazaron los canjes. Y desde entonces tampoco la mayoría de ellos ha cobrado.
Pero los comentarios de Kicillof del 3 de enero arruinaron el optimismo de que Argentina trataría de resolver la disputa de la deuda después de que expirara la cláusula RUFO.
El valor de la oferta de Argentina -que se compone de un conjunto de bonos Discount con vencimiento en 2033 con intereses capitalizados y los cupones PBI a 2017 capitalizados- es de unos 82 centavos por dólar, según calculó Barclays.
Incluso si los holdouts aceptaran una pérdida del 15% sobre la sentencia, los inversores tendrían derecho a 312 centavos de dólar, según cálculos de Mariva.
Stuart Culverhouse, economista jefe de Exotix, dijo que incluso si el gobierno la presidenta Cristina Fernández de Kirchner no está dispuesto a ofrecer más a los holdouts, la perspectiva de una nueva administración en 2016 evitará que los precios de los bonos en default caigan.
Para él, la oferta de canje es un "precio mínimo" para los títulos: "No creo que los precios caigan a ese precio porque creo que los demandantes esperan por un mejor trato".