El Gobierno pidió celeridad a la Corte de Apelaciones y que mañana mismo, tras la audiencia, dicte su sentencia sobre el levantamiento de las medidas cautelares. A través de una carta a los tres miembros del tribunal de segunda instancia, el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, dijo que “esperamos que consideren anunciar su decisión en el día de la audiencia oral, o lo más pronto que sea factible”.
La intención del Palacio de Hacienda es poder pagar lo más temprano posible, para lo cual ya activó el road show en Estados Unidos y Gran Bretaña para atraer inversores a la mega emisión de bonos por u$s 12.500 millones, necesarios para terminar con el default. Prat Gay dejó en claro a los jueces de la Corte que el apuro surge porque un día después de la sesión, que tendrá lugar mañana, se cumple la fecha estimada de pago para el cuarteto de fondos buitre más grandes y que a partir de ese día esos fondos pueden retirarse del acuerdo. La otra particularidad de la fecha en cuestión es que se incrementará la tasa de interés diaria por la cual se actualiza el reclamo de ese grupo de buitres, cuyo pago al 14 de abril alcanzará los 4.667 millones, ya que se actualiza en u$s 322.000 por día.
“Un grupo con un acuerdo por u$s4.650 millones tiene el derecho unilateral de terminar su acuerdo si no se les paga el 14 de abril. Nuestra emisión de bonos en el mercado de capitales está organizada y preparada para ser ejecutada a nivel global, pero no podrá llevarse a cabo sin una indubitable resolución por parte de la cámara”, reza la carta de Prat Gay. “En circunstancias normales, no estaríamos escribiendo sobre una materia tan cara a la jurisdicción de esta Corte como el timing de una decisión y lo hacemos con el máximo respeto por las prerrogativas de esta Corte”, expresó el ministro a los jueces con jerga diplomática. “De todas formas, seríamos negligentes como funcionarios públicos si no solicitáramos celeridad”.
De esta forma, el Gobierno intenta que el eventual respaldo del tribunal de segunda instancia al fallo de Griesa que ordenó levantar las medidas cautelares que pesan sobre el país sea lo más temprano posible para cursar los pagos durante las horas siguientes y poder cumplir con la fecha estipulada. El road show está previsto que se realice durante toda esta semana y terminará el viernes en Washington. Recordó que el país ya cumplió con la primera de las condiciones para el fin de los injunctions con el tratamiento parlamentario aprobado por el Congreso Nacional. “No hay nada más que podamos hacer para cumplir con nuestras obligaciones, a menos que tengamos la certeza de esta Corte de que se levantarán las medidas cautelares”, les dijo el ministro.
Horas después de la misiva de Prat Gay al tribunal, NML y los otros buitres grandes reforzaron en otra carta su posición, en la que manifestaron su desconfianza en el hecho de que el país sea el que determine el fin de las cautelares a través de una declaración al juez Griesa de que las dos condiciones fueron cumplidas, sin ninguna acción judicial posterior. Incluso argumentan que el artículo 2 de la ley aprobada por el Congreso contradice una de las condiciones fijadas por Griesa a pedido del país: que el Gobierno derogue “los obstáculos legislativos”. Según los buitres, ese artículo 2, que hace depender la vigencia de la ley al respaldo de la Corte de Apelaciones al fin de las cautelares, representa en sí un “obstáculo”. Forma parte del intento de NML y compañía de lograr que, al menos, la Corte respalde la decisión de Griesa pero que ordene alguna modificación que les asegure a los demandantes la posibilidad de “disputar” el estatus de condiciones cumplidas.
Mañana, desde las 10 de Nueva York, se realizará la audiencia en la Corte de Apelaciones, en la que tendrán oportunidad de hablar ante los tres jueces abogados del país, de NML, de Aurelius, bonistas bajo ley extranjera, bonistas individuales, el fondo EM de Kenneth Dart y eurobonistas.
Por otra parte, ayer en el juzgado de Griesa tanto Argentina como el grupo denominado bonistas ley extranjera hicieron descargos por la demanda de esos acreedores de que el Gobierno les canceló acuerdos firmados antes del 29 de febrero. De acuerdo con los funcionarios argentinos, esos contratos sólo tenían la firma de los fondos y no la contrafirma oficial, y que además incluían demandas prescritas.
Volvió Greylock
El fondo especulativo Greylock se presentó ante el juzgado de Thomas Griesa para demandar sobre bonos en default y, bajo el viejo argumento de la cláusula pari passu, por la cual NML derrotó en los tribunales a la Argentina, reclamó que el país repague el dinero por bonos impagos en monedas europeas (marcos alemanes, liras italianas y euros).
Greylock se hizo conocido en el país al haber perdido un juicio en el que intentó bloquear la reestructuración de deuda de Mendoza en 2004, lo que fue impedido por un juez.