El BCRA bajó los rendimientos que ofrece por sus Letras a 91 días 100 puntos básicos hasta 26,8%. Es la segunda vez en cuatro semanas que recorta esa tasa que llegó a un máximo de 28,8% en el año y ayudó a lograr la paz cambiaria que se vive hoy. El parate en el crédito y su efecto en la actividad económica motivan el relajamiento. Hoy hay un vencimiento récord de $ 8.000 millones en letras
El Banco Central (BCRA) recortó por segunda vez en el año el rendimiento predeterminado de las letras con las que regula la masa monetaria hasta ubicarlas en 26,8% a 91 días. Las altas tasas de Lebac formaron parte del dispositivo con el que el titular de la entidad, Juan Carlos Fábrega, desactivó la corrida cambiaria tras la fuerte devaluación de enero. A 15 semanas del shock cambiario y con las reservas en alza la prioridad de la política monetaria parece virar hacia la reactivación del crédito y la actividad.
En su llamado a la licitación semanal de Lebac y Nobac que tendrá lugar hoy el BCRA detalló que ofrecerá letras a 91 días a una tasa del 26,8% y a 112 días a 26,99%. La cifra supone una baja de 100 puntos básicos respecto al rendimiento que ofrecían una semana atrás y de 200 puntos básicos respecto del máximo que marcaron en el año.
La baja en las tasas de Lebac llega justo para la licitación con mayores vencimientos del año, $ 8.145 millones que vencen hoy y que el BCRA deberá superar con creces si pretende aspirar pesos.
Tras la devaluación del 18% que le imprimió al peso en enero, Fábrega ideó un dispositivo de manual para desincentivar expectativas de mayores devaluaciones.
Primero, disparó las tasas de Lebac 13 puntos porcentuales hasta casi 30% para arrastrar al resto de las tasas, volver más atractivos a los activos en pesos y aspirar tanto circulante como fuera posible. Luego, desempolvó una vieja norma que impone un límite a las tenencias en dólares de los bancos, equivalente al 30% de su patrimonio (10% de su patrimonio, en el caso de contratos a futuro) con la que obligó a las entidades financieras a “vomitar” casi u$s 2.500 millones entre dólares y bonos nominados en dólares más casi u$s 4.000 millones nominales en contratos futuros. Por último, planchó sostuvo al dólar spot debajo del $ 8,015 máximo que anotó en el primer mes del año.
Como resultado, el BCRA pasó de perder u$s 3.600 millones de sus reservas en el primer trimestre del año (u$s 2.800 millones sólo en enero) a sumar u$s 1.151 millones en abril (su mejor marca mensual desde julio de 2010). La inflación, además, pasó de un salto inicial del 3,7% en el mes de la devaluación al 2,6% de marzo (datos oficiales Indec, todavía en probation) y amenaza con tocar el 2% en abril.
Claro que este ajuste monetario no estuvo exento de costos. En lo que va del año el crédito al sector privado creció apenas 1,25%, una severa caída en términos reales en comparación con los 10 puntos de inflación acumulados en tres meses.
El índice de producción industrial de FIEL y OJF como los despachos de combustibles y cemento y los patentamientos de autos registraron variaciones anuales negativas en el primer trimestre. Ventas en shoppings y supermercados e impuesto al cheque crecieron a tasas anuales similares a la inflación, pero con tendencia a la baja.
Esos indicadores motivaron diversas reuniones entre el ministro de Economía, Axel Kicillof, y Fábrega –la última de ellas celebrada la semana pasada– en las que el primero reclamó moderar el ajuste y priorizar la actividad.