Por Pablo Cofano – CEO & Founder – ROMA Management.
Las zonas aledañas a Rosario están cobrando cada vez mayor relevancia cuando hablamos de la construcción de barrios residenciales. La intención de esta nota es compartir algunos consejos con los desarrolladores inmobiliarios para que evalúen correctamente las tierras antes de concretar una compra.
Con el fin de analizar y dilucidar esta cuestión, le consultamos a Pablo Cofano, CEO de Roma Management Inmobiliario, quien nos comentó lo siguiente: “Cuando se adquiere un lote, debemos analizar que el mismo se adapte a las características de nuestro proyecto y tener en claro qué cuestiones estamos dispuestos a resignar y cuáles no. En primer lugar, tenemos que centrarnos en el aspecto económico, es necesario conocer el volumen de venta potencial que el desarrollo implicará y, en base a eso, determinar qué costos se pueden asumir en relación a las tierras. Luego será el momento de poner el eje en diferentes rasgos que determinarán la factibilidad de nuestro desarrollo. La ubicación es uno de los puntos esenciales, no sólo es necesario evaluar las características del suelo sino además la distancia a los centros urbanos, los predios vecinos, los accesos, el transporte y su frecuencia, la seguridad, entre otros. Es importante intentar realizar este análisis de la forma más objetiva posible, teniendo en cuenta cuál es la valoración de la zona por nuestro target. Si partimos de una buena ubicación, contaremos con una gran ventaja a nuestro favor. También habrá que tener en cuenta la infraestructura de servicios disponibles como ser redes de agua, cloaca, luz, gas… este ítem influirá significativamente en nuestros costos de ejecución.”
En el transcurso de nuestra charla, Cofano también resaltó: “Otro punto imprescindible es analizar en profundidad las cuestiones legales y las posibles restricciones o limitaciones edilicias que nuestro proyecto puede enfrentar. No todas las zonas admiten las mismas intervenciones y transformaciones, por lo que resulta vital contar con esas certezas antes de concretar cualquier operación. Aconsejaría que se tomen el tiempo que haga falta para analizar y asesorarse en cada uno de los puntos que pueda generar algún tipo de inconveniente. Eso les ahorrará grandes dolores de cabeza en el futuro.” Además, el desarrollador señala: “Es primordial realizar un análisis integral del terreno, de sus condiciones intrínsecas y también de factores externos como ser el entorno socio-ambiental. Nos tenemos que formular las mismas preguntas que se haría el potencial comprador, ponernos en su lugar y determinar cuáles son los pros y contras que le encontraríamos al lugar si lo fuéramos a adquirir para vivir ahí con nuestra familia. Si encontramos respuestas satisfactorias a nuestros interrogantes, estaremos por el buen camino.”
Como última reflexión, aconsejamos a los desarrolladores asesorarse con profesionales de diferentes áreas que puedan poner luz en aspectos, de diferente índole, que puedan suscitar cualquier tipo de duda o suspicacia. Siempre es preferible retrasar un poco las decisiones y asegurarse de dar pasos certeros que garanticen el éxito del proyecto.