Esta semana nos animamos a un almuerzo de fin de año con 4 desarrolladores importantes para hacer un balance.
Uno contó que, antes de la pandemia, su compañía estaba tecleando y que durante el 2020 logró evitar la quiebra gracias a que la propia pandemia le impuso tolerancia a sus acreedores.
El otro hizo un recuento de todos los activos de calidad que tuvieron que vender para afrontar pasivos.
El tercero reconoció que tuvo que renegociar la compra de un importante terreno que le había adquirido al estado, y quedarse sólo con una parte debido a las dificultades con las que se encontró al fondear la transacción.
Y el último, dedicado al desarrollo suburbano, fue el único que, con alegría, relató los logros del 2020. Un año, que para la gran mayoría, fue para el olvido.
Comprar nuevos terrenos de cara al 2021? Entre los presentes la respuesta fue unánime: en canje, si es muy bueno, lo estudiamos. Cash, no existe.
En esta pequeña pero representativa muestra del sector, se resume lo que pasó este año y lo que se espera que suceda el entrante.