Después de los pesos que retiraron el BCRA y el Tesoro esta semana, se redujo la liquidez a corto plazo. Pero la fuerte emisión monetaria no deja que las tasas suban
Después de que entre el Tesoro y el Banco Central (BCRA) retiraran casi $ 14 mil millones en dos días, la tasas a un día para préstamos interbancarios rebotó al 21% ayer y las tasas de las Lebac en el mercado secundario subieron hasta 3 puntos básicos. Pero se estima que durará poco, debido a la liquidez acumulada por los bancos y a la fuerte emisión monetaria que continúa realizando la entidad monetaria. De hecho, el Central ha decidido no bajar las tasas que paga por sus letras para evitar presiones cambiarias en un contexto de recalentamiento del dólar paralelo.
Ayer la tasa de interés para los préstamos interbancarios a un día pasó de promediar 13% a negociarse el mayor volumen a 19-20% ayer. «Me parece que es lo que buscaban y es consecuencia de los $ 15 mil millones que retiraron en la semana», dijeron en la mesa de un banco nacional.
En tanto, las Lebac a 20 días pasaron de 19,75% a 23% en el mercado secundario, ya que los bancos dejaron de comprarlos al haber disminuido la liquidez de corto plazo. La menor liquidez se debió a que el blue subió casi 7% en los últimos diez días y el gobierno dio una señal para evitar mayores tensiones cambiarias esta semana.
Anteayer el BCRA esterilizó $ 8.884 millones a través de su licitación semanal de letras, y se llevó casi toda la oferta de los bancos, cuando en las licitaciones anteriores había dejado de tomar posturas para forzar al mercado hacia el Bonac («Volvió el BCRA de Fábrega», resaltó otro operador). Y el lunes el Tesoro recolectó $ 5.103 millones en la colocación de dos series de Bonac, a mayo y julio del año que viene.
Sin embargo, el call cerró a la baja hasta promediar un 16,9% y en las mesas estimaban que hoy podría dar otro paso para abajo por como terminó la rueda de ayer.
Sucede que, por ser fin de mes, los bancos acumulan liquidez para cumplir con la posición promedio de encajes mensual y ayer salieron a quemar los excedentes. En tanto, empezó a entrar a las cuentas de los clientes el dinero de los haberes y aguinaldos.
Así que, pese a la señal del gobierno, la liquidez del sistema financiero no se alteró. La base monetaria crecía al 33% al 12 de junio pasado, principalmente impulsada por el financiamiento al sector público. El proceso de esterilización que hacía el BCRA después de transferir adelantos transitorios al Tesoro perdió fuerza desde que comenzó la gestión de Alejandro Vanoli.
La consecuencia es que la gran cantidad de pesos en la calle derrama en el mercado del dólar paralelo. Frente a esta situación, fuentes oficiales admitieron que «fue prudente no bajar las tasas en las dos licitaciones anteriores» de Lebacs, respecto de las segunda y tercer semana del mes. La entidad monetaria bajó este año menos de un punto porcentual las tasas de la parte media de la curva para impulsar la compra de las letras a largo plazo. Pero hoy la tasa a 98 días sigue en 26,04%.
Al ponerle objetivos múltiples a las tasas de las Lebac, como es hoy usarla de base para remunerar a los plazos fijos minoristas, el BCRA debe seguir endeudándose a tasas altas para evitar que el público evite los depósitos a plazo para irse al dólar.
«Hay mucha liquidez. El BCRA sigue expandiendo la base monetaria. Y son más pesos que los que el mercado puede absorber naturalmente. Los bancos no tenemos demanda de préstamos. Entonces hay pesos sobrantes», dijeron en la mesa de un banco internacional. «Si el BCRA baja la tasa de las Lebac, baja la tasa de los plazos fijos de menos de $ 350 mil, que están regulados por la tasa de las Lebac. Ahora subió el dólar. No esperamos que las bajen, porque no sería lo mejor hacer menos atractivos esos pesos», agregaron. En realidad, el mercado espera que las tasas suban.