El dólar blue subió 6 ruedas de las últimas 8 y cotiza en un máximo histórico nominal, en tanto, los tipos de cambios bursátiles se mantienen al alza cercano a sus récords
El dólar blue cerró en su valor máximo nominal este miércoles ya que se vendió a $1.255. Por su parte, el dólar Contado con Liquidación rozó los $1.300 mientras que el MEP se mantuvo por encima de los $1.200. Ante esto, Ámbito se propuso armar un «semáforo» del billete verde. Para eso consultó con economistas que eligieron cuáles son las amenazas (color rojo), el contexto que puede influir (amarillo) y los eventos que harían que se moderen las alzas (verde).
Semáforo del dólar: rojo
Para el economista Gustavo Ber, si suceden menores compras del BCRA, y el crawling-peg del 2% se extiende demasiado tiempo, habrá un atraso cambiario y esto presionará al billete verde al alza. Cabe remarcar que el dólar oficial subió un 118% al inicio del gobierno de Javier Milei pero la fuerte inercia inflacionaria del 25,5% en diciembre y una expectativa del 20% al menos en enero y febrero, ponen en riesgo el ancla cambiaria que busca el ministro de Economía, Luis Caputo.
A su turno, el analista financiero Gustavo Quintana reveló cuáles serían sus señales de alarma para el dólar: si el BCRA continúa manteniendo la tasa de interés fuertemente negativa, se decide continuar con las restricciones cambiarias (cepo), no se da de baja al dólar tarjeta ($1.385 contra $1.250 del blue) y continúa un proceso inflacionario que adquiera una dinámica difícil de contener. Cabe resaltar al respecto que el BCRA decidió bajar las tasas de interés a pesar de la escala del IPC (en estos momentos está en 110% de TNA).
Por su parte, la economista Elena Alonso, dijo que es mala señal para el dólar que las tasas reales sean negativas porque esto genera más demanda de dólares. En cuanto a la ampliación de la brecha, agregó más motivos: «El Gobierno arrancó con una brecha del 20% pero están las mismas restricciones que antes, por ejemplo, para los importadores que no pueden acceder al dólar oficial y esto genera demanda en los tipos de cambios financieros».
Claudio Caprarulo, director de Analytica, también analizó cuáles son las amenazas que tiene hoy por hoy el dólar: «La normalización de las importaciones va a empezar a presionar sobre la demanda de importaciones mientras la estacionalidad de las exportaciones hace que la oferta de dólares sea baja. Probablemente el Central empiece a comprar menos dólares pudiendo pasar a tener una posición vendedora. Y también, la falta de instrumentos de ahorro por el esquema de tasas que eligió el gobierno hace que la liquidez continue teniendo incentivos a ir hacia el dólar».
Para el economista Amilcar Collante, «lo más relevante es la expectativa de evaluación. Hay que ver si el ajuste fiscal si es viable, si pasa la ley y si se pueden hacer todas las reformas que quiere el Gobierno. Cualquier negativa de la oposición que complique el ajuste fiscal, lo veo como una señal de amenaza».
Por último, el economista Jorge Neyro expuso cómo principal señal de alarma: «Las ventas de reservas del Banco Central, ya que pondríaan en riesgo el logro de la meta de reservas con el FMI. Parece díficil en el corto y mediano plazo».
Semáforo del dólar: amarillo
En cuanto a los eventos importantes a tener en cuenta, Ber especificó que habrá que monitorear aprobación de Ley Ómnibus y precio de la soja. En cuanto al primer punto, el Gobierno consiguió dictamen y el oficialismo tiene previsto iniciar el debate en el recinto de la Cámara baja este jueves. Cabe resaltar que la semana pasada, el Ejecutivo prorrogó hasta el 15 de febrero las sesiones extraordinarias.
De esta manera, las espadas del presidente Javier Milei tendrán más tiempo para discutir los ejes de su primera y principal apuesta jurídica-política plasmada en el megaproyecto rotulado de manera oficial como «Ley Bases y puntos de partida para la libertad de los argentinos». La acción se conoció después de que finalizara la movilización convocada por la Confederación General del Trabajo (CGT).
En cuanto a la soja, el precio se ubica actualmente debajo de los u$s450 y acumula en 2024 una caída de casi 5% en el mercado de Chicago, presionado por una cosecha abundante en Argentina. Mientras se pronostica un calor estresante en las zonas de cultivo de nuestro país para los próximos días, los agentes del mercado granario siguen debatiendo el tamaño de las cosechas de maíz y soja en desarrollo de Brasil, que influirán en el valor de la oleaginosa.
Sobre esto también se expresó Collante: «Algo importante sobre el contexto, es la cotización de los granos que es fundamental para Argentina. En estos momentos están en retroceso y si ajustan mucho más a la baja tenés que tener en cuenta que tal vez no lleguen tantos dólares como necesita acumular el Banco Central».
Caprarulo, por su parte, mecionó al Bopreal del cual indicó que funciona para frenar la suba del CCL: «El problema es que aún el mercado secundario tiene poco volumen». El jueves pasado fue la cuarta licitación del Bopreal con una adjudicación de sólo VN u$s340 millones, acumulando un total de VN u$s1.644M. «Si bien las puntas en el mercado secundario se empiezan a achicar, no resulta atractivo aún para los importadores», reveló en un informe Eco Go.
Neyro, por último, colocó en el color «amarillo» la continuidad de las tasas negativas a largo plazo. «Dejaría al dolar como uno de los pocos refugios frente a la inflación junto a los plazos fijos UVA», explicó.
Semáforo del dólar: verde
Gustavo Quintana opinó que la brecha se va a achicar en la medida en que algunos sucesos comiencen a concretarse como: la sanción del proyecto enviado por el Poder Ejecutivo (la Ley Ómnibus), menor reflujo de pesos (que crezca la demanda de dinero), suba de la tasa de interés y un descenso paulatino de la inflación.
A su turno, Ber aseveró que dentro de las señales positivas para que merme la cotización del billete verde se encuentran: que haya una fuerte desaceleración de la inflación, y un acceso a financiamiento externo. «Con respecto al segundo requisito, me refiero a que se consigan fondos frescos del exterior», aclaró el economista.
«Yo creo que va a mermar cuando comience a impactar la cosecha en el balance del Banco Central (BCRA), entonces se espera que comiencen a ir liberando el cepo a medida que aumentan reservas. Creo que será como una especie de surtidor con el cuál van a poder controlar el tipo de cambio», aseguró Alonso.
Para Caprarulo, «la fuerte caída en los ingresos de las familias y las menores ventas en algunos sectores reduce los pesos que se pueden destinar a hacer cobertura con la compra de dólares».
Por su parte, Collante opinó: «Es buena señal si el BCRA sigue comprando y tenés un cepo un poco más abierto. El desafío es abrir importaciones y poder seguir acumulando reservas, más que nada el segundo trimestre del año».
Para finalizar, Neyro reconoció como «una buena señal» para el tipo de cambio que se logre la aprobación de gran parte de las reformas económicas que propone Milei: «Esto aumentaría la confianza en el plan económico y la viabilidad para pasar reformas impositivas en el futuro».