Las devaluaciones competitivas podrían sobrevenir en un mundo en donde la inflación dijo presente. Estados Unidos retira estímulos y la crisis en el mundo emergente avanza a pasos agigantados.
En la Argentina por cada peso que emite el Banco Central, genera un pasivo de $2. No vemos en el horizonte un acuerdo con el FMI. Las monedas de la región podrían devaluarse, y la caída en los bonos americanos hace subir la tasa. Una tormenta perfecta antes de las elecciones paso, entérate cuando puede devaluar argentina.
El mundo está en un escenario complejo. Estados Unidos con una inflación del 5,3% anual, para el índice de precios consumidor y 8,3% anual para el índice de precios del productor, pone en alerta a la Reserva Federal, que en una primera etapa retiraría estímulos y en una segunda etapa, podría subir la tasa de interés de corto plazo.
La consecuencia de este escenario, es una probable suba de la tasa de retorno de los bonos de tesorería a 5, 10 y 30 años. En la actualidad cotizan a 1,15% anual, 1,64% anual y 2,10% anual, niveles que triplican los visto durante la pandemia.
La suba de la tasa de los bonos americanos, podría hacer apreciar al dólar, y esto planchar la cotización de las materias primas agrícolas como la soja y el maíz, que hoy conviven con una buena oferta de la cosecha americana, y una promisoria evolución de la cosecha en Brasil.
La crisis energética, impacta para que la inflación se consolide a la suba, el petróleo ya cotiza en torno de los U$S 80, cuando en la pandemia llego a cotizar en torno de los U$S 10 el barril. El gas natural, paso de U$S 1,50 el millón de BTU a los U$S 5,80 actuales.
Un tema a tener presente es la devaluación de las monedas emergentes. La lira turca viene superando máximos, y cotiza arriba de 9,0 por dólar. El real en 5,65 por dólar está cerca de superar el máximo de 5,80, la suba de la tasa de interés en Brasil, no detiene por ahora la escalada alcista.
Consecuencias sobre Argentina
Nuestro país depende, de la generación de dólares de la balanza comercial, toda baja en los productos que exportamos genera un impacto negativo en la oferta de dólares. En diciembre se cosecha y se exporta una parte importante del trigo, es una aspirinita para un cuadro grave de escasez.
Las devaluaciones competitivas podrían sobrevenir en un mundo en donde la inflación dijo presente. Estados Unidos retira estímulos y la crisis en el mundo emergente avanza a pasos agigantados.
Brasil tiene un severo problema energético, la inflación podría llegar a los dos dígitos, en el año 2022 hay elecciones presidenciales y Lula Da Silva lidera las encuestas. Un combo que podría hacer devaluar al real. En Turquía el gobierno es débil, y el ataque a la Lira Turca podría continuar. China, está desacelerando su crecimiento, la crisis energética hará que por mucho tiempo el país crezca menos del 6% anual. Argentina, en el marco de un gobierno que aporta un alto desconcierto, una renegociación de la deuda con el FMI que no está cerrada, elecciones de mitad de mandatos complicados y una interna política en la coalición gobernante, se puede ver impactada por este escenario.
El gobierno tuvo que aplicar un congelamiento de precios por decreto, porque la inflación se le escapaba de las manos, no hubo acuerdo con empresarios para llevarlo adelante, y la consecuencia de esta medida sería, desabastecimiento y precios en alza en el mercado informal.
Cada mercadería que se vende en Argentina, tiene más de un mercado para negociarse. En el mercado de Liniers, la hacienda tiene un precio, en dicho mercado se negocia no más del 8% de la hacienda que se faena. Por fuera de dicho mercado, existe un precio más elevado, es el 92% de la hacienda que se negocia. Argentina tendrá precios congelados, pero es probable que a esos precios no se consiga mercadería, otra vez el doble mercado.
En el mercado del dólar, hay múltiples dólares. El oficial ($ 100) y el Blue ($ 187) se multiplicaron. Hoy existe el dólar MEP y el Contado con Liquidación ($180), todos directa o indirectamente están intervenidos. Si queres conseguir cantidad, tenes que comprar vía el mercado de acciones, allí el dólar está en $ 198, o en el SENEBI, que es donde compras dólares contra una contraparte (transacción entre privados), en donde el dólar estaría en $ 200.
Sin embargo, en los últimos 12 meses la inflación aumento el 52,5% y el dólar oficial el 29,6% y el dólar blue el 24,7%, en Argentina tenemos la inflación en dólares más alta del mundo. Esto también trae como consecuencia ser menos competitivos, exportar menos y escasez de dólares en el mercado.
Conclusión
* El mundo no nos sonríe, hay una gran inestabilidad financiera, con probable suba de tasas en Estados Unidos y devaluación de monedas emergentes.
* Argentina no logra vertebrar un plan económico, la demora en el acuerdo con el FMI, no contribuye a despejar las expectativas negativas sobre nuestra economía.
* La baja en el precio de las materias primas y las menores exportaciones no son una buena señal.
* El gobierno sigue emitiendo a destajo, en los últimos 12 meses emitió $ 1.457.694 millones, se endeuda en $ 1.629.165 millones y pago intereses por $ 1.170.206 millones. Para que se comprenda claramente, el Banco Central invento, creó o emitió dinero por $ 1.457.694 millones, mientras que la consecuencia fue un aumento del pasivo de $ 2.799.371 millones. En Argentina por cada peso que se emite, nos endeudamos en casi $ 2.
* La consecuencia de este combo nacional e internacional, será una devaluación de nuestro signo monetario, usted se preguntará ¿cuál? Por ahora el dólar SENEBI o dólar acciones que son muy libres, pero en breve le llegará el turno al dólar blue, MEP y Contado con Liquidación, para el mes de enero o febrero le tocará el turno al dólar oficial, si no es que tenemos una sorpresa en diciembre.