El presidente del Banco Central (BCRA), Federico Sturzenegger, consideró que la mejor estrategia que pueden seguir los productores agropecuarios para reducir la incertidumbre del tipo de cambio es tomar coberturas en el mercado de futuros. Además, resaltó la decisión mantener una tasa de interés alta: «La política monetaria fue contundente en la baja de la inflación».
«La mejor estrategia que pueden tomar para reducir la incertidumbre asociada a la volatilidad del tipo de cambio, en este contexto, es tomar coberturas en el mercado de futuros», dijo el titular del Banco Central en un discurso en Rosario, ante un auditorio con fuerte asistencia de productores agropecuarios, a quienes dirigió esta recomendación.
Hablando en el 9no. Foro de Economía y Negocios de la fundación Libertad, Sturzenegger consideró que «todas aquellas empresas cuyo flujo de caja se encuentra expuesto al tipo de cambio podrían, de este modo, acotar la volatilidad indeseada en pesos asociada a la flexibilidad cambiaria».
Más adelante, precisó que «dado que la devaluación esperada en el mercado de futuros está arbitrada con la tasa de interés en pesos, y en vistas de que el BCRA buscará garantizar una tasa de interés real positiva, tomar una cobertura en el mercado de futuros puede implicar un retorno real positivo adicional para el flujo de caja del negocio».
En su intervención, Sturzenegger volvió sobre sus últimos análisis sobre la evolución de la tasa de inflación, recordando que ésta «irá decreciendo aún más en los meses venideros, y estará en un rango en torno a 21%-22% anual en julio», destacando que «esos serán los niveles de inflación más bajos desde 2009».
Agregó que «el proceso de desinflación se ha producido también, y de manera más pronunciada, en el segmento de precios mayoristas», ya que para el mes de mayo «la variación interanual de los mismos ya se ubicó en 15,3%».
• Emergentes
En tanto, Sturzenegger, sostuvo que «lo que va a hacer que Argentina funcione no es nada que nos van a dar de afuera» sino «la consistencia de lo que hagamos nosotros», al restar trascendencia a la decisión de Morgan Stanley de postergar para 2018 la posibilidad de recalificar al país como «mercado emergente».
Al disertar en Rosario en el noveno Foro de Economía y Negocios de la Fundación Libertad, Sturzenegger dijo que el Banco Central está cumpliendo las metas de inflación fijadas y agregó que «no hay un tema dogmático en reducir el gasto público» sino que el Gobierno lo que se plantea es «reducir el que no sirve».
Sobre la decisión del banco de inversión Morgan Stanley, señaló que «la calificación de mercado emergente tenía que ver con el mercado de acciones» y recomendó que «no hay que tener tanta expectativa ni no expectativa».
A renglón seguido disparó que «lo que va a hacer que Argentina funcione no es nada que nos van a dar de afuera, va a ser la consistencia de lo que hagamos nosotros».
En esa línea, planteó que «son nuestros deberes domésticos los que van a generar el camino del desarrollo» y «no otra cosa».
Ante un auditorio colmado de empresarios y productores rurales, Sturzenegger disertó sobre el programa de desinflación que lleva adelante el Banco Central.
Repitió que en julio «vamos a estar en una inflación del 21 por ciento» interanual, y recordó que «arrancamos el año con una inflación del 36,6%».
Resaltó la decisión de la autoridad monetaria de mantener una tasa de interés alta para producir una contracción de la oferta de pesos. «La política monetaria fue contundente en la baja de la inflación», dijo, para luego agregar que incluso «hicimos una baja que resultó demasiado rápida» para la perspectiva gradualista del Gobierno.
Reconoció que hubo «un relajamiento de política monetaria excesivo» en febrero pasado que fue revertido a partir de marzo y que esto «es lo que permitió que en mayo los números de inflación se encauzaran».
Por último, Sturzenegger rechazó que el Banco Central esté solo en la lucha contra la inflación al sostener que las transferencias del organismo monetario al Ejecutivo se redujeron después de estar en 5 puntos del PBI en el 2015 -último año de gestión kirchnerista- a 1,5 puntos en lo que va de 2017.