Tras la ampliación del Bonar 24 que hizo el gobierno anteayer, los precios de los bonos soberanos bajaron levemente ante la reacción de los fondos buitre, quienes buscan bloquear la licitación embargando los fondos de los inversores y lograron que el juez Thomas Griesa pidiera información sobre la colocación a los intermediarios. De todos modos, la baja es muy leve porque el mercado tomó con optimismo que Argentina pueda endeudarse en el exterior, a pesar de que la tasa pactada supera en unos 4 puntos lo que pagan países similares.
«Tomamos dinero a una tasa menor anterior a Griesa. Antes lo hacíamos al 12%, por lo que no tiene que ver con los fondos buitres», afirmó el ministro de Economía, Axel Kicillof, y cargó también contra los «economistas y opositores»: «Antes decían que no nos prestaban, ahora dicen que nos prestan caro, están cansados de correr el arco», dijo en declaraciones radiales.
Era esperable que el precio del Bonar 24 bajara luego de que los inversores pagaran u$s 103 anteayer y ahora haya una mayor oferta del papel en el mercado. Desde los u$s 105 anteriores a la licitación, ayer cerró a u$s 104.
Pero el Boden 15 y Bonar 17, dos títulos que se benefician con la colocación porque el gobierno obtuvo divisas para pagar sus vencimientos, también cedieron ayer, aunque menos de un dólar cada uno. El Boden 15 cedió a u$s 98,75 y un rendimiento del 11,09% y el Bonar X bajó a u$s 96,55 y un rendimiento del 8,947%.
«Las caídas fueron ínfimas, por lo que pudiera pasar en la audiencia con Griesa. Que embarguen el dinero sería una mala noticia, porque reduciría las chances de cualquier emisión afuera», dijo Alejo Costa, estratega Jefe de Puente.
Si la emisión del Bonar 24 a 8,956% destrabara el mercado internacional para Argentina, la siguiente cuestión es si el país debe seguir endeudándose a tasas cercanas al 9%.
Los países vecinos a un plazo similar pagan tasas hasta tres veces más bajas: Uruguay, 3,5%; Perú, 3,2%; Paraguay, 4,1%, y Bolivia, 5%. Incluso naciones menos desarrolladas que Argentina, como El Salvador (5,8%) y Honduras (6,2%) se fondean más barato.
«Argentina, por el litigio judicial, paga una tasa más alta que la que pagaría si pudiera resolverlo. Dado el contexto actual, en que el país no les puede hacer llegar a los deudores el pago de los bonos del canje en el exterior, es una buena tasa. El litigio legal pone trabas que van más allá que las trabas macro», dijo Costa. «(u$s 1.415 millones) es un monto muy bajo de emisión. En términos de ratio de deuda, para Argentina es bajo. Podrá ser una tasa más alta que la de los vecinos, pero ellos se endeudan más que Argentina», agregó.
Alberto Bernal, jefe de Research de Bulltick Capital Markets, coincidió: «Si Argentina no tuviera el tema holdouts, estaría emitiendo al 5%. La intransigencia del kirchnerismo para arreglar con los holdouts, a pesar de que es injusto, le cuesta varios miles de millones en fondeo adicional». Pero agregó: «Obviamente sería mejor que la tasa fuera baja. Pero mirándolo en perspectiva de largo plazo, es preferible tener acceso a recursos que no tenerlo. Ayuda a mejorar la cuenta corriente».
Incluso Bernal opinó que el gobierno podría canjear el Boden 15 a esta tasa. «Si eventualmente Argentina lograra resolver el asunto financiero y el riesgo país bajara al nivel de Bolivia, canjearía el Bonar 24 por un cupón más bajo más adelante».