El viento a favor va a soplar hasta marzo, cuando se firme el acuerdo con el FMI porque después viene el estricto cumplimiento de las metas pactadas
Las reservas perdieron USD 896 millones. USD 736 millones le fueron transferidos el viernes al FMI y se vendieron USD 80 millones en el mercado mayorista para importar combustibles, que dejaron a las reservas en USD 37.621 y con un resto para pagar el martes USD 300 millones pendientes.
La primera parte está cumplida y abrió camino a la segunda, la de redactar la Carta de Intención, que se firmará en mazo, donde se volcarán todas las condiciones en letra grande y chica, la más complicada de las dos.
Por supuesto, el mercado operará más relajado y el dólar puede sufrir otro reacomodamiento al tiempo que pueden recuperar precio los bonos de la deuda en dólares. Este viento a favor va a soplar hasta marzo, cuando se firme el acuerdo con el FMI porque después viene el estricto cumplimiento de las metas pactadas que serán revisadas por los auditores del organismo antes de cada giro de fondos.
Letra chica
Cuando se lea la letra chica del convenio surgirán los primeros inconvenientes, porque habrá ajustes fuertes sobre salarios, jubilaciones, subsidios, empleo público y tarifas sin contar que cada tres meses la Argentina deberá rendir examen de cumplimiento de las metas (devaluación, emisión, gastos, quita de subsidios a tarifas de energía, entre otros). Como los desembolsos son trimestrales, sino aprueba se acaba el ingreso de dólares del FMI, salvo que medie un “waiver”, es decir un perdón al incumplimiento.
El mercado apuesta a que el Gobierno conseguirá los USD 5 mil millones que le exigen que debe tener en las reservas a través de préstamos de organismos multilaterales, de China y de Rusia.
Según el analista financiero Christian Buteler “hasta ahora lo mejor es que se superó el default. Después falta el documento final. Si el acuerdo implica implemente lo que mencionó (el ministro de Economía) Martín Guzmán, son metas alcanzables, no sencillas pero posibles, que ayudarían a la economía.
Lo fundamental, obviamente será conocer la letra chica porque puede haber alguna sorpresa en las metas que se establecieron y el cumplimiento porque en los 22 acuerdos que se firmaron con el Fondo, el país no cumplió con ninguno y en el primer tramo esas metas quedaron en suspenso y el país solo cobró el primer tramo del préstamo que no tenía condicionalidades. Las estadísticas no ayudan. La revisión trimestral puede trabar alguno de los desembolsos. Ese es un punto que nos va a mantener en el ojo de la tormenta para ver si cumplimos las metas pactadas”.
Acuerdo light
El equipo de la Fundación Capital definió al acuerdo como light pero con grandes desafíos”. Califica a la política monetaria y fiscal como “bastante exigentes y un muy importante desafío cambiario”
La Fundación califica de light el acuerdo porque no hay reformas estructurales previsionales o laborales y sigue faltando el programa económico integral. El FMI, dice el trabajo de la Fundación, ve falta de apoyo de la política y suplanta esas reformas con metas cuantitativas. Las dudas que plantea para reducir el déficit fiscal es porque habrá menos herramientas que en 2021 y “difícilmente genere la suficiente confianza para que haya inversión real privada”. Tampoco descarta el riesgo cambiario con “la brecha principal como la principal amenaza”.
Estos son los datos que tomarán en cuenta los inversores y adonde volcarán su dinero:
1- El lunes las acciones de compañías de electricidad y de gas, pueden subir sus precios porque sus balances mejorarán consistentemente porque sus tarifas van a ser ajustadas al mismo ritmo de la inflación o más.
2- Los bonos CER, que indexan por el costo de vida van a estar tan o más buscados que los bonos de la deuda. El viernes el TX22, que ya estaba sobre la par, subió 0,10%.
3- Los títulos en dólares de más corto plazo pueden tener un rebote importante que los lleve cerca de 35% de paridad en una primera etapa y terminen en 40%.
4-Habrá ingreso de capital del exterior para hacer transacciones con activos argentinos que participarán de las licitaciones de bonos del Tesoro.
5-Los bonos de la deuda con ley argentina que se utilizan para comprar dólares, dejaron atrás sus precios de default. El viernes el AL30D que se utiliza para el dólar MEP avanzó 7,22%. Mientras el bono del contado con liquidación, el GD30C anotó un alza de 8,23%. Ambos dólares bajaron $7 a $ 16,66 y 226,11, respectivamente.
6-La posibilidad de devaluación más acelerada va a ser subir los bonos dollar linked que están atados al precio del dólar oficial. El TV22
7-Hay un escenario para invertir en pesos y tomar después ganancias en dólares.
8-Con la caída de $ 10 del contado con liquidación se abaratan las adquisiciones de ADR’s y ETF’s que son certificados de tenencias de acciones, materias primas o índices bursátiles que cotizan en Nueva York.
9-El monto de negocios en pesos crecerá en plazos fijos o Letras de Descuento porque encuentran el estímulo de poder generar ganancias en dólares a futuro.
10- El riesgo país va a ser menor, por supuesto. La suba de los bonos de ley extranjera, hicieron que bajara 41 unidades (-3,4%) 1.841 puntos básicos. Hubo títulos de la deuda con ley Nueva York que subieron más de 4% en dólares.
11- Las elevadas tasas de interés en pesos atentarán contra el consumo, pero arrimarán más plata a los bancos que puede redundar en una suba de las acciones de las entidades que cotizan en la Bolsa. Además, como los bancos tienen en su poder acciones que cotizan en la Bolsa, al subir de valor les mejor el balance. Por si fuera poco, sus fondos de inversión recibirán depósitos de los ahorristas que no querrán perderse este corto verano financiero.
12- Los papeles que están ligados a la exportación tanto agropecuaria como industrial, recibirán la aprobación de las grandes manos porque ven ganancias mayores porque recibirán en pago un dólar más alto.
El vilipendiado FMI pasó a ser parte de la política argentina, porque si bien se hizo una conveniente negociación, hay una parte del Gobierno que lo rechaza. El arreglo corre más riesgos políticos que económicos.